viernes, 11 de julio de 2014

Eternity -One Shot Niley


HOLAAA DISFRUTEN ESTE ONE SHOT ES ESCRITO POR ABBY




Un año, dos años y así paso un tiempo desde la ultima vez que había tenido una platica civilizada con el, no lo había vuelto a ver desde las constantes peleas telefónicas en las que el me ofrecía ayuda y yo se la negaba, un juego tonto e infantil que se repetía una y otra vez. Nos podíamos amar un día y odiar al otro, siempre uno terminaba lastimando los sentimientos del otro y después lo intentábamos arreglar pero nunca funcionaba.

Era una de esas situaciones que tu sabes que se van a repetir y aun así te importa una mierda sufrir por los posibles ataques en busca de protegerse a si mismo. Sabes que te van a decir algo que te puede herir, algo que siempre va a abrir una vieja herida en el corazón. Pero a pesar de todo esperas con ansias que te la digan para poder responder con algún arma arrojadiza. Justo como siempre pasaba. Lo irónico de las cosas era que la ultima vez que esa pelea había ocurrido, no fue por abrir heridas del pasado que ninguno de los dos logró cerrar del todo. Era por intentar recuperar algo que inevitablemente se había perdido.

Me enamore, dejé a un chico con el que ya tenia historia por uno que me prometía el cielo y todas las estrellas de la vía láctea, y lo peor era que me las había dado mientras le pareció conveniente. Logró conseguir el existo que por si mismo jamas habría logrado y me engañó, terminamos y me di cuenta que seguía amando al chico que había dejado por estar cegada por el australiano de ojos azules. Para mi mala suerte el ya había encontrado a alguien mas, una australiana también ¿el mundo es un pañuelo no? ya que esa chica resultaba ser amiga de la familia de mi en ese entonces ex novio.

No me intereso mucho su historia con esa mujer, sabia que las cosas posiblemente no saldrían bien, ella era mayor por varios años y simplemente no funcionaria de ninguna manera posible. Por despecho volví con el chico que me había engañado, despecho y que aun seguía creyendo en los cuentos de hadas y los felices para siempre. El segundo intento había sido bueno, y se mantuvo bien la relación entre idas y vueltas y discusiones leves. El me pidió matrimonio. Para ese entonces yo ya estaba sumamente enamorada de el, había logrado dejar atrás mi pasado y concentrarme en mi futuro con el, planeaba casarme, formar una familia e incluso dejar mi carrera por un tiempo para dedicarme a el. Pero fue entonces cuando todo se derrumbo.

No sabia si en serio el había pensado casarse conmigo en algún momento o el anillo que lucí tan orgullosa en mi dedo era solo una declaración de propiedad, una cadena que me unía a el como diciendo que ya nadie podía acercarse a mi porque estaba apartada o en serio me amaba lo suficiente para casarse conmigo pero las cosas salieron mal. Las peleas llegaron, los celos hicieron acto de presencia y me alejé de mis amigos por demanda de el ya que según el no me hacían ningún bien. Mas que nada era que todos mis amigos estaban ligados a mi pasado, el no quería mi pasado ya que en el se encontraba mucha gente que me amaba y que quería lo mejor para mi. Incluso mi propio padre lo odiaba, y yo deje de hablar con el por meses por defenderlo, que irónica es la vida, tal vez debería de haberle hecho caso y no habría sufrido tanto.

Desde ese entonces mi vida se hizo un descontrol, tanto que yo sentía que no podía mas, en muchas ocasiones sentía tanta presión sobre mi que me descargaba teniendo ataques de ira contra el que se pusiera frente a mi. A veces odiaba a todo mundo, odiaba a todos menos a el, a mi prometido aun cuando era el quien provocaba que saliera la bestia. Cada vez las llamadas telefónicas se hacían esperar mas y mas tiempo, ya sabia que cuando recibiera una de sus llamadas seria para avisarme que iría a la ciudad después de grabar, o al contrario, que no podría ir porque tenia que ver a su familia en Australia, después las llamadas consistieron en atrasar la fecha para la boda. Atrase la maldita fecha unas diez veces hasta que todo lo que había guardado contra el salio con la fuerza de un volcán.

Fue una pelea que duro mas de un mes. Entre idas y vuelta, peleas, discusiones y reconciliaciones de media hora todo termino y nunca me había sentido tan... muerta.

Desde el día que todo terminó me escondi detrás de una mascara de felicidad diciendo que jamas había estado tan feliz en toda mi vida, después llego la etapa del "tal vez lo extraño un poco pero viviré" y por ultimo la etapa en la que admitía que no podía estar sin el. La etapa mas estúpida y las mas odiada de mi vida. Peor incluso que la etapa del acné, en ese entonces al menos tenia un novio, si, el otro chico que yo había jurado estaba en el pasado mas enterrado que un cadáver.

Bueno, pude darme cuenta que no estaba tan enterrado. Mientras yo estaba sufriendo el encontró el amor. Creo que era el karma, siempre he dicho que el karma es una perra y es cierto. Yo me encargue de dejarle bien claro que era la mujer mas feliz del mundo con Liam incluso invitándolo a mi boda, sabia que era lo mas bajo que le podías hacer a un ex novio que cada vez que colgaba una llamada telefónica podías saber que se estaba guardando un "te amo" entre los labios. Pero para mi era una forma de hacer que el se desencantara por mi y se diera cuenta que yo ya no estaba disponible y que tenia que encontrar el amor en otro lado.

Bueno, creo que si lo hizo ya que cuando yo ya me encontraba sufriendo por mi rompimiento el estaba saliendo con una Miss Universo ¿la vida podía ser mas cruel? si, si podía. Empece a encontrarme con el en todos los lados posibles, su novia era una maldita modelo con medidas perfectas, tierna y aunque parecía imposible para una modelo, reina de belleza o Miss Universo, era inteligente que era lo que mas me hacia querer matar a Nick. Los encontraba hasta el la sopa y siempre el estaba con esa sonrisa que solía ser para mi, y que aun que me dolía admitirlo, yo misma había hecho que dejara de serlo. Pero yo seguía viéndolos de lejos en fiestas, alfombras rojas, etc. Y eso no significa que fuera fácil ya que la vida se empeñaba en que al final quedáramos frente a frente. El aun con esa sonrisa en su rostro de "estoy enamorado, mi novia es sexy y esta noche tendré sexo hasta que amanezca" nunca se iba, su novia para terminar era simpática, quería con todas mis fuerzas que fuera una maldita hueca, tonta y molesta pero era simpática e incluso me consoló, si, maldita sea, la novia de mi ex me había consolado en los baños de un antro después de haber visto a mi ex prometido con la flaca anorexica operada con la que me había puesto los cuernos por ultima vez.

Pero no es un cuento en el que todo es perfecto. Después de eso todo siguió normal, cada quien por su lado, no me convertí en la mejor amiga de Olivia, eso seria simplemente hipócrita cuando yo había estado tratando de llamar la atención de su novio de todas las formas posibles para pedirle su ayuda y poderme vengar de Liam ¿habían funcionado mis intentos? no. Nunca notó que las malditas canciones que cantaba se las dedicaba lanzando indirectas de que necesitaba su ayuda. La cual había llegado un poco tarde.

 Cuando el llego a ofrecer su ayuda yo estaba en esos momentos que pensaba que nada podía salirme mal ya que todo en mi vida estaba prácticamente arruinado. Pero sorprendentemente aun había algo mas que me salio mal. había recibido una llamada de Nick diciendo que quería verme, que sabia que estaba en Nueva York y que tenia que hablar conmigo y tontamente acepté.

Estaba pasando por una etapa en la que me sentía incomprendida, me había peleado con mi papá por tamaño idiota que era Liam cuando sabia que no valía la pena, pero ¿acaso era mi culpa? el amor te deja idiota, aun que seas la persona mas lista del mundo puedes cometer estupideces por amor, yo lo defendí, aun después de todo lo que me había hecho lo defendí, me distancie de mi familia, mi mamá, mi papá, mis hermanos. De todos los que querían ayudarme, pero yo no quería ayuda, yo lo quería a el.

Y acepté ir a ver a mi ex novio, pensé que quería ayudarme, y así era, pero sinceramente ¿el creía que dejaría que sus discursos baratos de como podía desahogarme con la música me podría ayudar cuando me sentía completamente perdida? tal vez había sobre reaccionado cuando me ofreció su ayuda, yo lo había tomado como un buen acto e incluso me abrí completamente a el hablando sobre mi vida con Liam y como me sentía, incluso cuando el me había dicho lo de la música y me propuso componer una canción en ese mismo momento me pareció una buena idea. Pero cuando él recibió una llamada de su novia, me volví loca.

- Así que piensas que la música me puede ayudar... ¿sabes algo? si, me ayuda mucho, pero eso no me va a regresar todo lo que tenía, no me va a traer a Liam de vuelta, y yo no quiero música lo quiero a el.
- Hace unos minutos estabas de acuerdo con la idea de componer, ya habíamos empezado la canción y estaba todo bien.
- Si, pero nada de lo que diga, cante, escriba o toque me va hacer sentir mejor, ademas tu solo quieres un éxito ¿esperabas que te invitara a cantar conmigo?
- Yo solo quería ayudar, no me importa con quien cantes la canción, solo quería hacerte sentir mejor, que supieras que tenias a  alguien en quien podías confiar, que supieras que no estas sola a pesar de lo que tu crees, ese imbécil no lo es todo en la vida. Quería que dejaras de sentir dolor, ser alguien que te ayudara.
- ¿Y esa persona vendrías a ser tu? ¿Tú? ¿Quién fue el primer hombre que me lastimo? Fuiste tú. Me lastimaste incluso mas que Liam, me creaste promesas falsas que nunca habías pensado cumplir.
- Yo no fui el único que hizo las cosas mal, tu tampoco estabas poniendo de tu parte, en las dos ocasiones que estuvimos juntos las cosas salieron mal porque ninguno de los dos ponía todo, o eras tú quien intentaba que funcionara o era yo pero nunca los dos y no digas que me amabas mas de lo que lo amas a el ahora y que yo te lastime más que el porque sabes que es mentira.
- Yo te ame, te ame con todo lo que tenia hasta que lo arruinaste.
- ¿Lo arruine? ¿Como lo arruine? Si, entiendo que nunca hicimos publica nuestra relación, pero no podía hacerlo, no podía revelarme contra el contrato porque yo no estaba solo, no era como tu que eras tu sola, yo tenia a mis hermanos, los tres dependíamos de ese contrato y no les podía fallar, lo siento por elegir a mi familia, pero igual tampoco te hacia de lado porque algún día pensaba hacerlo publico, solo necesitaba mas tiempo.
- Y yo comprendía eso Nick, sabia que prácticamente tenias prohibido respirar sin autorización, yo estaba en la misma situación. Pero no hablo de eso... me presionaste.
- ¿En qué te presione? Jamás te obligue a tener relaciones conmigo si es de eso de lo que hablas, y ni se diga de presionarte... te di tu tiempo.
- No hablo de eso, hablo de en general nuestra relación, eramos muy chicos y ya parecíamos una pareja de toda la vida...
- ¿Y eso te molesto? ¿Que hiciera nuestra relación mas formal? No te había pedido matrimonio para el siguiente mes. Te hice una promesa, una promesa de amor pero a ti te daba miedo el compromiso, te escuche hablando con tu mamá el día que te hable de matrimonio.
- Teníamos 16 años Nick ¿quien se quiere casar a los 16 años?
- ¿Y a los 19 si? ¿Cuanta diferencia es esa? ¿Tres años? Yo no te había pedido que te casaras conmigo al día siguiente, pero si en uno o dos años.
- Y mientras tanto un compromiso que durara años ¿no?
- ¿Y cuanto estuviste comprometida con Liam? ¿Cinco meses y luego se casaron?
- ¿Sabes que? Si, tienes razón, nunca te ame como a el, nunca nadie me hizo sentir lo que el me hacia sentir con solo mirarme...
- Cuando te miraba a ti y no a la cámara...
- Yo se que el me amaba, que dejara de sentir o lo mismo o confundirse es otra cosa...
- Yo me confundí, hable contigo y tu dijiste que querías seguir, que harías que la confusión se fuera, no sirvió y yo termine contigo pero nunca te fui infiel, jamas me acosté con la primera que se me cruzaba en el camino cuando estaba enojado contigo, a pesar de todas las veces que peleamos jamas se me paso por la cabeza engañarte. Y el que lo hizo te la pasas defendiéndolo.
- ¿Y que quieres Nick? Lo amo, no lo he dejado de amar y estoy con... una revolución en mi cabeza, no se que sentir, no se que hacer y no se que mierdas estoy haciendo aquí contigo abriendo heridas del pasado. No quiero pelear, he peleado con todo lo que tengo pero estoy cansada Nick, ya no puedo mas... siento que golpeo con todo lo que tengo y la vida me da con el doble de fuerza. Necesito algo solido en mi vida, necesito a alguien. Y simplemente nadie esta ahí cuando los necesito, hoy puedes estar aquí y mañana no, ahora tienes novia Nick, una relación formal con alguien a quien quieres, si no es que ya la amas, solo no quiero que me dejes como lo hacen todos...

Me importaba en serio una mierda lo que pasara, yo solo pude besarlo. Mi mente era un caos, quería a Liam, lo amaba, estaba segura de eso, pero frente a mi estaba mi primer amor, el mas importante de una chica, era la persona que me enseño a amar y me hizo feliz, me hizo la niña mas feliz del mundo y luego me convirtió en la mujer mas feliz. Había reído, llorado, y pasado tantas cosas con el que mi mente estaba tan confundida y no sabia si llorar o simplemente alejarme y no volverlo a ver. No tenía que esperar mucho, el hizo lo que parecía mejor. Se separo de mi y sentí como algo se rompía adentro de mi. El ya no me amaba.

 - Yo te ofrecí ayuda, no te puedo ofrecer mas que una amistad, ahora soy yo quien no puede.
- Me estas cobrando por esa vez ¿cierto?- Pregunte riendo un poco entre lagrimas. Esta escena ya había pasado antes, pero la persona que se negaba era yo. Como cambian las cosas en solo unos años.
- Algún día tenia que hacerse justicia.

 Y desde ese día no lo volví a ver, nos evitamos y no manteníamos ningún tipo de conversación, incluso había prohibido que me preguntaran sobre el. Mi manager era el que leía las preguntas y si había una de Nick no dejaban que la hicieran. Al grado que se volvió algo exagerado algo un poco estúpido pero solo estaba tratando de olvidarme de todo ¿que mejor manera que esa? Tenia que empezar de nuevo.

*-*-*

 - Miley ¿me alcanzas la azúcar?- Era el día de molestar a la hermana mayor.
- Si vuelves a decirlo te voy a lanzar la jarra de vidrio a la cabeza.

Noah estaba en mi casa, estaba enorme ya con 19 años pero seguía siendo mi molesta hermana pequeña que repetía las cosas mil veces con la intención de hacerme molestar, aunque estaba a punto de lanzarle algo a la cabeza a ver si apagaba su interruptor del habla. O mínimo desmayara.
- Oye, ¿Adivina a quien vi ayer?
- No tengo la menor idea y no me interesa.
- Yo creo que si te va a interesar. De hecho vi a dos personas.
- ¿A quienes Noah?- Sabia que si quería que se callara tenia que escuchar lo que sea que quería decir.
- Primero vi a Liam carrera-arruinada Hemsworth. Al parecer estaba haciendo una audición para la película que en la que tu querida hermana, osea yo, va a actuar. Y al parecer estaba audicionando para el papel de mi hermano. Lo primero que dije fue "jamas en esta vida" pero era la mejor opción que tenían los productores hasta que llego otro ex tuyo.
- ¿Quien?
- Nicholas Jonas o tal vez debería decir Nicholas recién-divorciado Jonas.
- ¿QUE?- Escupí el jugo de naranja por la impresión.
- Sip. Al principio no sabia si era buena idea que el recibiera el papel pero luego pensé que entre Liam y Nick prefería a Nick un millón de veces. Ya sabes... lo que el otro te hizo no fue muy lindo, al menos Nick había terminado contigo antes de irse con...
- Ok, no tienes que recordarme mi patética vida amorosa. Continua.
-Nick fue el ultimo que hizo la audición, al parecer no estaba muy entusiasmado con el papel pero le debía un favor al director de la película y le había pedido hacer la audición, si no quedaba pues se librara de todos modos. Lo que pasa fue que después de su audición me lo encontré en un café y me puse a platicar con el. Y me contó que se había divorciado cuando le pregunte que había pasado con su vida los últimos años. Mas que nada los dos años que estuvo desaparecido, nadie sabia nada de el y cuando me dijo que estaba divorciado me sorprendió.
- Yo me entere que se había casado pero después de eso se retiro y no sabia en donde se había metido.
- A mi me contó.
- ¿Que te dijo?
- ¿Ahora si te interesa no?
- Cuenta maldita sea.
- Bueno, cuando se caso, resulta que su esposa estaba muy enferma, o eso decía ella. Habían estado juntos menos de un año, según necesitaba vivir en un lugar tranquilo y vivir en la ciudad le hacia daño así que se fueron a vivir a un lugar lleno de naturaleza. Irónicamente el lugar es donde nació su primera novia.
- ¿Tennessee?
- Aja. No haré la historia larga, al final resulta que Jenna quería estar lejos de las cámaras, ella nunca fue famosa y no estaba acostumbrada, ademas de que si la seguían a todos lados no tendría forma de... bueno ponerle los cuernos a su querido esposo.
- ¿Que? ¿Esa zorra hizo eso?
- Si, yo no puedo creer que Nick Jonas tan reservado como es me haya contado todo eso. Pero al parecer cambio mucho en estos años. Bueno, en fin después resulta que ella quedo embarazada y Nick no quería dejarla durante el embarazo a pesar de que no sabia si era de el o de su amante. Pero ella aseguraba que era de el pero Nick no lo creía. Cuando el bebe nació resulta que si era de Nick, le hicieron las pruebas dos veces y las dos veces salio positiva. No me contó mucho sobre el bebe pero se ve que lo quería mucho, bueno a pesar de las condiciones en las que ese bebe vino el mundo seguía siendo su hijo así que lo amaba, quiero creer.
- Así que tiene un hijo....

No sabia porque tenia esa sensación rara en el pecho, el había hecho su vida, eso estaba claro. Y yo seguía estancada en donde estaba hacia años, no quería una relación seria con nadie, no quería hijos hasta estar casada, cosa que seria hasta dentro de unos cinco años.

- Si pero, pero no. El bebe murió a los tres meses, fue muerte de cuna. El había ido a ver a su mamá a Nueva York ya que estaba enferma y Jenna le hablo y le dijo que el bebe había muerto. Al final yo creo que a la zorra de su esposa se le ablando el corazón y le dio el divorcio sin hacer escándalos ni nada.
- Dios mio, jamas he tenido un bebe pero creo que eso es la cosa mas dolorosa que le puede pasar una persona. Ver morir a su propio hijo y mas si es un bebe. La ha de ver pasado muy mal Nick.
- Si, bueno, no se ve como el Nick que conocía desde niña, ha cambiado mucho física y mentalmente, tal vez la perdida de su bebe lo cambio pero ahora es otra persona. Si antes no sonreía ahora creo que tiene cara de piedra siempre.
- ¿Tan mal esta?
- Bueno perder a un hijo creo que es algo que te marca...
- Si, buen punto.
- A mi me gustaría tener un sobrino tuyo.
- Espera unos diez años y lo tendrás. Por mientras tu puedes tener un bebe si tanto quieres uno o me voy con Liam a que me haga uno si quieres.
- Mejor tírate de lo mas alto de la torre Eiffel de cabeza. Que bueno que no te casaste con el.
- Ni con nadie Noah no me lo recuerdes.
- Estas mejor sola. Y mas ahora que terminaste con ¿como se llamaba? ¿Calvin? cada vez que lo veía tenia un color de cabello diferente y cada vez le quedaba menos.
- Es un total fraude ese chico.


No había pensado mucho en la situación de Nick los siguientes meses hasta que fui a ver a mi hermana al set de grabación. Nick había quedado como el hermano de mi hermana... raro, lo se.

Le lleve comida a Noah y también a Nick. A pesar de todo el tiempo que llevaba sin hablar con el, no pensaba dejarlo afuera si se unía a nosotras, ademas seria interesante ver que tanto había cambiado estos cinco años sin verlo y dos sin haber oído nada de el mas que su retiro de la música. Bueno, haciendo música para venderla, ya que estaba cien por cierto segura de que no había dejado la música aun casado. Yo creo que la necesitaba mas que nunca con una mujer como la que le toco. Era una perra y no me cansaría de repetirlo.

Al llegar al set apague mi celular y entre sin hacer ruido. Justamente Noah grababa una escena, me quede observando de lejos hasta que sentí una mirada sobre mi. Volteo y lo primero que veo es a un Nick de 26 años y lo sentí de nuevo. Lo mismo que había sentido la primera vez que lo vi. Trate de ignorar ese sentimiento pero aun así me acerque a el con una sonrisa y lo abrace fuerte por la cintura. Ese día justamente había visto el calendario con una sonrisa, era 11 de Junio. Un año mas que lo conozco. Así que en honor a ese día me acerque a su oído y le dije "odio tu camisa."

Cuando llego la hora de la comida salimos de ese lugar, no quería comer en donde comían todos los demás porque sabia que se la pasarían hablando de nosotros. así que comimos al aire libre, había una zona llena de pasto y arboles así que nos sentamos en el césped sobre una manta y empezamos a platicar. Noah se veía feliz. No siempre prestaba atención a los estados de animo de Noah, pero ella siempre fue muy unida a Nick, lo quería como un hermano, tal vez por eso era que tenían tanta química en la pantalla como hermanos. Aún después que termináramos ella jugaba con Frankie y Nick veía películas con ellos o les compraba nieve. Mi hermana lo adoraba.

En un momento dado Noah nos dejo solos diciendo que tenia que ir a ver algo de su vestuario para la siguiente escena. Mentiras y mierdas que se inventaba mi hermana. No sabia por donde empezar una conversación mas intima con el así que dije lo que me venia rondando la cabeza por un tiempo.

- Noah me contó lo de... tu hijo.

 Me arrepentí en cuanto las palabras salieron de mi boca. Se puso tenso y su cara se convirtió en una mascara de piedra, ver su reacción en persona y no por las palabras de Noah me hizo sentir un hueco en el estomago. El amaba a su bebé y yo le había recordado su muerte. A veces me sentía estúpida.

- Lo siento, no quería hacerte sentir mal o incomodo... fue desubicado de mi parte.
- No, esta bien solo es un poco raro hablar del tema. Se hizo un tema tabú en mi casa así que nadie menciona el tema ni habla de tener hijos, bebes o el nombre de mi hijo.
- ¿Como se llamaba?
- Adam. Cosa que hace todo incomodo porque es el nombre de mi hermano, ahora mi madre no lo puede regañar con su segundo nombre sin sentirse culpable.
- ¿Oigo molestia en tu voz?
- Puede ser...
- ¿Te molesta que se tomen así el tema?
- Me molesta que nadie quiera hablar del tema pensando que si hablan de la muerte de mi hijo o mencionan algo sobre un bebe me pondré a cortarme las venas frente a todos. Me duele, no lo niego, era mi hijo y en serio lo amaba pero que se porten tan exagerados me hace sentir mal, siento que alejo a mi familia porque cada vez que alguien saca el tema toda mi familia le aplica la ley del hielo y se pelean por semanas.
- Ha de ser mas difícil de esa manera.
- Lo es. Bueno, la única que no se comporta así es Alena, ella es una niña así que su tierna e inocente pregunta sobre lo que no entiende y si no entiende porque no ha visto a su primo, pregunta y yo le cuento de alguna manera. Ella es tan linda, a veces me dice que reza por el todas las noches.
- Que linda.
- Si, lo es.
Nos quedamos en silencio por unos minutos sin vernos a los ojos. Era mejor hablar así, te podías abrir mas a la conversación casi sin pensar ni que estas diciendo, como si hablaras contigo.
- ¿Por que aun sigues soltera?
- Esa no es una pregunta muy linda para hacerle a alguien ¿sabías?
- Si, pero nunca me ha detenido eso.
- No quiero una relación seria. No he encontrado a mi... príncipe, aun que ya deje de creer en ellos, solo he tenido un príncipe y se caso con otra princesa.- El hace una mueca graciosa, la alcance a notar viéndolo de reojo.
- Mejor dicho con una bruja.
- Ok, te casaste con una bruja y me dejaste sola.
- Tu me abandonaste primero por un australiano de ojos azules y dos metros de alto... y ancho.
- Si, creo que yo fui la que empezó con esto ¿no?
- Si. Creo que toda esa historia que nos hicimos nosotros mismos, estando con otras personas, evitándonos, peleando, indirectas, celos... aquella vez que terminaste con Liam porque te había puesto los cuernos por primera vez y que tu y yo no salimos de mi habitación dos días completos, me utilizaste como tu juguete sexual.
- No es como que tu te hayas quejado mucho esos dos días. No puedo creer que cada vez que me peleaba con Liam saliera corriendo hacia ti. Creo que por eso Liam te odiaba.
- Y al final gano la batalla, nos separo, nos hizo pelear y que no habláramos en casi dos años.
- ¿Fuimos unos tontos no?
- Si, bastante.

Empezaron a salir temas comunes de que hicimos en los últimos años hasta historias que teníamos para contar, igual que nuestras historias, recordar los momentos de cuando estábamos juntos, todo parecía estar perfecto y era divertido. Para nada tocamos el tema del rompimiento ni de todo lo que vino después, simplemente no eran temas que debías recordare a tu ex a cada ocasión que podías. Platicamos hasta que escuchamos como le hablaron a Nick. Tenia que volver a grabar. El se levanto y me tendió la mano para ayudarme a levantarme.

- ¿Quieres salir mañana?
- ¿A donde?
- No lo se. Mis fines de semana son completamente aburrido viendo la basura que pasan en la TV y comiendo cosas no muy saludables para mi diabetes.
- ¿Eres rudo y no le temes a tu enfermedad?
- Simplemente la enfermedad no me domina.
-Iré contigo a alguna parte que no sea tu departamento entonces.
- ¿Tienes miedo que intente abusar sexualmente de ti?
- No, porque yo cooperaría con gusto ya que no he tenido sexo en un largo tiempo pero no quiero ver TV, para eso mejor me quedo en casa.
- Entones ¿paso por ti?
- Si, te mandare un mensaje, Noah me dio tu numero.
- Esta bien ¿nos vemos mañana?
- Si, claro.
- Lleva ropa cómoda.
- ¿Ya sabes a donde vamos a ir?
- Puede ser...

Parecía una niña en su prima cita ¿que diablos me pasaba? ya no tenia trece años para ponerme nerviosa, pero increíblemente lo estaba. No sabia que esperar de la cita con Nick, no sabia si saldría todo bien como para repetir. No estaba segura de que podría pasar con el tiempo si seguían las citas ¿volveríamos? tal vez no, digo, se acaba de divorciar, lo ultimo que ha de querer es novia, peor aun, volver con su ex.

El timbre sonó y termine de aplicarme el labial y me acomode el cabello. Lo había dejado crecer los últimos tres años. No lo tenia tan largo como antes pero lo dejé a los hombros. Me gustaba como se veía, también dejé de teñirme rubia, ahora era castaña de nuevo. Después de tener mi cabello corto varios años empece a extrañar sentir el cabello en mi nuca. Ademas que hice una película y el cabello largo era requerido y yo lo tenia muy corto, me pusieron peluca, y me gusto tener cabello largo de nuevo y lo deje crecer.

- Pensé que te habías echado para atrás.- Dijo Nick cuando abrí la puerta.
- ¿Por que lo haría?
- Tardaste en abrir. Siempre eres rápida en abrir la puerta.
- Estaba arriba, ya no soy la adolescente que estaba arreglada para su cita desde dos días antes Nick.
- Claro, puede que tengas razón. Vamos.
- Yo se que la tengo.
- Espera. ¿Te llego mi mensaje?
-¿Que mensaje?- Saque mi celular para comprobar y tenia un mensaje nuevo.

Mierda, me pedía que llevara traje de baño. Corrí dentro de la casa una vez mas y saque un traje de baño. Tenia unos cincuenta y no encontraba la parte de abajo. Pero que mas daba podía combinarlo con otro.

- ¿Y me vas a decir a donde vamos?
- Vamos... a un sitio privado.
- Pensé que no estaríamos a solas ya que le frustración sexual puede ser un problema.- Lo mire de reojo y el solo sonrió antes de tomar una desviación fuera de la carretera.

El lugar no estaba muy lejos, solo treinta minutos por carretera, yo vivía casi fuera de la ciudad así que tal vez esa era la razón. El camino no era tan largo pero si era un poco confuso, tenías que dar como mil vueltas y habían muchos caminos ¿como diablos sabía si era el camino correcto? Llegamos a un portón ¿que diablos hacia un portón ahí? el se bajo y saco unas llaves de su pantalón, de las bolsas traseras. Hmmm hablando de eso, Nick había tenido un buen desarrollo en esa área.

- ¿En donde estamos?- Pregunte una vez Nick puso a andar el auto de nuevo. había metido el auto y se había detenido de nuevo a cerrar.
- Estamos en mi casa. Mi casa de playa para ser exactos.- El auto se detuvo frente a una pequeña casa de playa, no se veía tan moderna y lujosa, se veía, simple, sencilla y... me encantaba.

Se podía escuchar el sonido de las olas de fondo. Bajamos del auto y Nick saco una caja de pizza. Caminamos hacia la orilla de la playa y dejamos todo en la arena para después entrar a la casa. Yo me pondría el traje de baño y Nick sacaría un par de cosas para disfrutar de la playa.

La pizza había estado deliciosa, la cerveza que Nick había llevado estaba increíble, jamas había probado esa marca pero era mi favorita desde ese día. El agua estaba a una temperatura agradable y el día no podría haber estado mas hermoso, pero al final del día, todo se había empezado a ser incomodo.

No sabía que había pasado para terminar con ese ambiente tenso, no sabia si había dicho algo malo o si simplemente lo que para mi fue un gran día para Nick fue la peor cita de la vida. Oh mierda, era eso.

- ¿Estas molesto conmigo?
- No. ¿Por que?
- Te pusiste raro desde lo que dije en la playa... Lo de... ya sabes...- Por Dios, la niña de trece volvía.- Lo que dije sobre la cita. ¿Te molesto que pensara que era una cita?
- No, no me molesto, esta bien, las cosas se podían malinterpretar...
- ¿Entonces porque estas así?- Ya estábamos fuera de mi casa, el había detenido el auto pero ninguno de los dos tenía intención de salir de el. No hasta dejar claro todo esto.
- No quiero lastimarte Miley. En serio que no quiero hacerlo, pero no estoy listo para una relación, me gusta estar contigo, platicar, salir, disfrutar un día en tu compañía pero no quiero una relación ahora, ni creo estar listo a largo plazo. No es que no me gustes, en serio me gustas Miley, si no es decir mucho que incluso aun siento algo por ti. Me gustaría poder intentar algo en serio contigo, pero si ahora mismo intento algo contigo seria estar contigo por despecho, porque a pesar de que Jenna me hizo todo lo que me hizo yo la amaba y aun la amo.

Esto se sentía como cuando los papeles estaban invertidos, Nick me quería y yo quería a alguien mas. Lo peor del caso de la situación de ahora, es que yo apenas me daba cuenta que lo quería. A pesar de todos los intentos por olvidarlo, por estar con otra persona, siempre al final terminaba en la misma situación, queriendo a Nick pero sin atreverme por el orgullo.

- Si eso es lo que quieres, esta bien. ¿Cuando te volveré a ver?
- Yo te hablo.
- Esta bien. Nos vemos.- Me despedí de un beso en la mejilla y salí del auto.

Bien, al parecer estaba madurando en el tema "Nicholas", antes que el me hubiera dicho eso seria llorar por tres horas diciéndole "no me dejes, eres mi mejor amigo, Liam no me escucha como lo haces tu" y yo lo lastimaría, ya que en esos momentos el seguía enamorado de mi mientras yo estaba idiotizada por Liam. Aun me sorprendía como podía haber estado tan ciega. Si, es cierto que el había estado conmigo cuando todo mundo se alejaba, también que se portaba cariñoso conmigo. Pero todo eso era cuando había cámaras cerca, le había perdonado una infidelidad, algo que jure jamas perdonar, se lo había perdonado porque lo amaba y lo volvió a hacer dos veces mas. Me deje pisotear, pero nadie lo había vuelto a hacer, no se lo permitía a nadie.

Al menos Nick había sido honesto y me había dicho todo esto antes de hacerme ilusiones. Igual el nudo en la garganta seguía ahí desde que el me dijo que aun amaba a su ex esposa. Ella era una perra y el seguía enamorado de el y... yo no puedo decir nada. Ahora sabia lo que sentía Nick cuando me veía mal por Liam y a pesar de saber que era un idiota seguía enamorada de el. Gracioso como los papeles se habían invertido.

 - Ya llegue ya llegue ya llegue. Lo siento, ocurrio un pequeño accidente antes de salir y me regrese.
- Esta bien, pasa.
Era la decima vez que salia con Nick, no era mucho como "salir" a veces solo tomabamos un cafe en un parque o sacabamos a pasear a nuestras mascotas. Antes no tenia, deje de tener mascotas por un tiempo pero cuando fui a casa de Nick un viernes para ver peliculas me encontre con la sorpresa de que Elvis y su novia. Nick le habia conseguido la pareja, era de una amiga suya y se fue a Inglaterra y se la dejo a Nick y al parecer Elvis se entretenia con ella. Tenian unos adorables cachorros.

"- Awww son hermosos por favor di que me puedo quedar con uno ¿si?
- ¿Quieres uno?
- Si, no tengo ninguna mascota, no tengo ni peces. Desde que murio mi ultimo cachorro no quise ninguno mas pero mira la carita de este... es adorable.- Dije alzando a uno de los cachorros.
- Esta bien, puedes llevarte uno, uno de ellos va a ser de Joe, su gato murio la semana pasada y Joe sin mascota es un zombie, a ver si se anima con un cachorro. Regalarle un gato seria desalmado de mi parte.
- ¿Puedo llevarme dos?
- ¿Segura que quieres dos?
- Si, dos cachorros. Llamame loca pero no quiero que se me mueran y siento que los numeros impar son de mala suerte."

Y me quede con dos cachorros, eran seis asi que no creo que hubiera problema. Eran hermosos, no mentia cuando decia que la carita de uno de ellos me convencio. Estoy loca, lo se, pero sus ojos eran cafes y de alguna manera me recordo a Nick, lo se, estoy obsesionada.

Ya habian pasado cinco meses desde la primera vez que sali con Nick. Me quedo claro que no estaba teniendo citas con el desde que me di cuenta que desde la ida a la playa fue la "salida" mas "romantica" que habiamos tenido, las demas fueron a sitios tan comunes, e incluso publicos, solo una vez habia estado en su departamento, cuando nos quedamos a ver peliculas por el mal clima. Ese día estabamos en las mismas.

No sabia que diablos pasaba con la madre naturaleza pero el clima no podia estar mas bipolar, bueno, creo que mas que con la madre naturaleza tiene que ver con nosotros por lo del calentamiento global. En fin, afuera el cielo se estaba callendo, la noche anterior me tuve que quedar a dormir ya que las calles eran intransitables. Habia dormido con una camiseta de Nick y me habia congelado el trasero ya que la ropa de cama era de verano, porque de hecho, estabamos en verano. Ese día nada me tomaria desprevenida, lleve ropa por si las dudas.

- Dios mio el clima esta horrible y el trafico peor, no entiendo como la gente tiene animos de salir con esta lluvia.
- Antes te gustaba la lluvia.- Dijo Nick tomando mi impermeable y colgandolo.
- Si, pero no que se caiga todo el cielo y llueva todo el día causando inundaciones ¿te imaginas la gente pobre? ¿con goteras? ¿o los que viven en las calles? Ah de ser horrible.
- Lo bueno es que hay alberges, pero igual... nadie les regresa lo que pierden.

Nick estaba extraño desde hacia varias semanas, me evitó unas tres semanas hasta que por fin me hablo y nos pusimos de acuerdo para ver peliculas despues de ver el pronostico del clima.

La pelicula era estupida y el lugar de dar risa daba sueño. Era algo malo de las peliculas de comedia, tenian que ser MUY buenas para poderla considerar de "comedia" ya que a veces lo que a unos les da risa, a otros les da nauseas. Como a mi.

Yo solo pensaba en lo que habia pasado dos horas atras. Voltee a ver a Nick y el tenia los ojos puestos en la television mientras sus dedos jugaban con un hoyo  en mis jeans. No podiamos estar mas juntos, yo estaba casi sentanda sobre el y una manta nos cubria ya que, si bien era temporada de calor, con la lluvia se refrescaba al grado de dar un poco de frio.

Hacía ya dos horas que Nick y yo eramos pareja. Sí, tan raro como suena eso.

En cuanto llegue me di cuenta que las cosas serian mas que solo ver peliculas, el quería hablar, y no sabía si era para bien o para mal. En cuanto terminamos de cenar comida china el me guio hasta el sillón y empezó a hablar.

- Se que todo esto de nuestras salidas han sido un poco confusas. Escuche a Noah hablando por telefono contigo el otro día y justo en la parte en la que decias que ya no soportabas salir conmigo solo como amigos. Noah tenia el telefono en altavoz porque se estaba maquillando así que pude escuchar toda la conversacion.
- ¿Escuchaste todo?
- Si. Y siento mucho que todo esto te tenga así. Yo quería esperar un poco más, terminar de superar a la bruja de mi ex y mientras tanto tener una amistad contigo y luego empezar algo, no queria que esto fuera algo apresurado como las veces anteriores.
- Lo unico que yo no se es si esto en serio tiene futuro Nick. Ya no soy una niña que lo unico que quiere es una relacion de manita sudada, quiero una relacion seria, que todo el mundo sepa que eres mio, que pueda contar contigo para todo y que sepa que en serio nuestra relacion nos va a llegar a un lado. No solo quiero pasar el rato con alguien, quiero casarme Nick, tal vez tu ya no quieras volverte a casar por lo que paso con tu ex mujer pero yo si. Quiero casarme y formar una familia... y si eso no va a ser posible contigo creo que sera mejor dejarlo todo hasta aqui. Porque soy sincera y te digo que todas estas salidas para mi no han sido solo para formar un lazo de amistad.
- Lo se, yo tambien quiero una familia, solo porque mi ex mujer fue una perra y no queria a nuestro hijo se que no va a ser igual con todas. Se que tu amas a los niños y que jamas me engañarias, y si, te amo. Aun te amo, despues de todos estos años. Pero yo tambien tengo miedo de apurarme como todas las veces anteriores y que esto termine en un desastre.

Nos quedamos en silencio unos minutos, sin saber que decir nada. Ambos eramos consientes de eso. Podiamos tener mil y un motivos por las cuales apresurarse no era buena idea, ya nos habia pasado varias veces, juntos y con otras relaciones y terminaban siendo un completo desastre. Yo tambien queria que las cosas con Nick funcionaran. Y se que el seria un buen esposo, pero el camino del noviazgo hacia el altar era un largo camino, en el cual siempre era donde pasaban los desastres. Por primera vez tenia miedo, pero estaba segura de algo: Esta vez no me iba a rendir.

-Yo... quiero estar contigo, es un riesgo ya que aun no olvidas a tu ex pero...
- ¿Que no olvido a mi ex? Mi ex quedo en el olvido hace meses, un año para ser exactos, desde que nuestro hijo nacio y ella lo odio desde el principio. La amaba, eso no lo voy a negar porque no es algo que te puedas quitar tan facil por mas mala que haya sido esa persona. Pero desde que te volvi a ver me di cuenta que ya no la amaba. No es como si amaras a alguien si despues de ver a tu primer amor vuelves a sentirte de la misma manera que hacia años. Joven y enamorado.
- Tenia miedo, que ya no querias estar conmigo porque no me llamaste en varias semanas, pense que ya no me querias ver.
- No era eso, solo que se cumplia un año de la muerte de mi hijo y... no me sentia bien.

Yo y mi bocota. Claro que el queria volverme a ver, me lo acababa de decir y yo le tenia que reclamar. Estaba por disculparme cuando vi una lagrima salir de su ojos derecho. Oh no Nick. No llores.

- Lo siento soy una idiota, perdon, no queria... olvidalo. Ven para aca.

Me acerque mas a el y lo abraze. No recordaba haberlo visto llorar así, jamas habia llorado de esta manera o al menos no en mi presencia. Me partia el corazón verlo así, si yo creia que sufrir era perder a tus abuelos no imaginaba el dolor que se sentiria de perder a un hijo. Mi padre me lo dijo hacia dos años que mi hermano Trace murio en un accidente. No era hijo biologico de mi padre pero lo amo como si lo fuera y estaba destrozado.

Lloro media hora en mi hombro hasta que su respiracion se hizo normal de nuevo se separo de mi. Por sobre su hombro vi durante media hora la foto de su hijo. Tenia una foto de el en la mesa de centro en su sala, el bebe tenia unos dos o tres meses en la foto y se parecia a Nick, estaba hermoso. La vez anterior que habia ido no estaba ahí así que lo mas seguro era que la tenia guardada y apenas la saco. Incluso ver al niño me dio tristeza a pesar que no lo conocí. Pero oh mierda yo habria dado todo por tener a ese niño de Nick, no podia creer como algunas mujeres eran tan desalmadas.

En fin que cuando Nick dejo de llorar lo acerque a mi y lo bese, me siguio el beso, y despues otro y luego otro hasta que dejo de llorar por completo y termino riendo un poco antes de dejar un ultimo beso en mi frente, creo yo que ese ultimo fue por agradecimiento. Hmmm aya el sabra.

- Supongo que ahora podremos intentar algo...
- Si no me lo pides hoy mismo te corto los...
- ¿Quieres ser mi novia?- Dijo apresurado haciendome reir. Nada que ver los romantisismos de antes, ya no eran necesarios.
- Si.

Y un rato despues, ahi estabamos, viendo una pelicula abrazados tapados con unas mantas y comiendo poquerias... O eso es lo que haciamos hasta que se fue la luz.

- Oh mierda.

Tome mi celular y con el flash de la camara lo use de linterna.

- ¿Tienes linternas?- Le pregunte a Nick mientras caminamos a la cocina.
- Si pero creo que las velas son mas romanticas.- Lo mire con una ceja alzada y el me cerro un ojo.
- Idiota.
- Así me amas.-Dijo antes de besarme.
- Solo busca algo que no quiero pisar a los cachorros ni... nada.

Nick y yo habiamos superado la prueba, ya teniamos once meses juntos, lo cual superaba las expectativas de nuestras familias que habian hecho sus apuestas desde una semana a seis meses, Joe es el unico que apostaba a la boda. Y por como estaban las cosas la ultima semana, me parecia que Joe ganaria esa apuesta.

Aun no queria pensar en eso ya que podria ser cosa de mi imaginacion y me desepcionaria si todo lo que Nick estaba preparando hace una semana no sea un anillo de compromiso. Pero un 50% me decia que lo seria. Mas despues del accidente de Nick.

Los once meses juntos no habian sido solo amor y felicidad. Tambien tuvimos peleas, reconciliaciones, malentendidos y demas. Pero lo que mas habia marcado nuestra relacion ocurrio cuando teniamos solo ocho meses juntos.

Nick estaba en Nueva York, trabajaba en un nuevo proyecto con una cantante que apenas se hacia conocida por sus videos en youtube, Nick estaba encontrando talentos y paginas de internet y si en serio tenian futuro el mismo les producia un album. Habia trabajado con esa chica por varios meses, desde pequeñas presentaciones en vivo en algunos lugares, un par de amigos famosos que se hizo. Me habia caido tan bien que incluso yo hice un dueto con ella. Escribimos una cancion mientras Nick daba unos ultimos arreglos a su album. Cuando Nick nos escucho nos metio a la cabina de grabacion y fue el bonus track de su album.

En fin, Nick saliendo del estudio iria a Nueva Jersey a ver a su familia, las calles estaban mojadas. Cuando Nick cruzo una calle un auto impacto en el de el. El chico del otro auto salio ileso, a pesar de que el tuvo la culpa, pero Nick termino estrellado contra una cerca de madera, y una de las puntiagudas maderas se incrusto en el hombro de Nick.

Cuando recibi la llamada estube a punto de desmayarme. Mi hermano habia muerto en un maldito accidente, la diferencia es que el habia tenido la culpa por ir ebrio. Igual habia sido un accidente parecido pero su auto se incendio con el dentro.

No me moleste en empacar mucha ropa, solo un par de blusas, pantalones, zapatos y ropa interior, nada de maquillaje ni nada. Podia comprar mas cosas, ademas de que tenia un par de cosas en el departamento que Nick tenia en Nueva York. Apenas llegue lo primero que hice fue ir al hospital. Con mi bolso de viaje, luego se lo daria a Joe para que lo guardara en su auto de momento.

Fueron las peores tres horas de mi vida. Esperar a que Nick saliera de la operación. Desde que lo ingresaron estaba en operacion y no es necesario decir que ya habian pasado mas de doce horas en el quirofano, lo cual no me dejaba nada tranquila.

De ese accidente Nick termino con una pierna y un brazo rotos, una cicatriz en su hombro, por poco y se queda sin movilidad en el brazo, pero por suerte esa no fue su situación, el moriria sin la movilidad de su brazo, es musico y para eso necesita sus dos manos y los dos brazos con libre movilidad.

Su herida se infecto dos veces ya que la piel de un diabetico muy sensible, las heridas y la diabetes nunca se llevarian bien, es muy dificil tratarlas y con facilidad se pueden infectar y tardan un poco mas en cicatrizar. Así que para evitar complicaciones se quedo dos meses en el hospital, dos meses en los que no me aleje de su lado para nada. Me quede en Nueva York con el hasta que salio del hospital, despues con el en su departamento.

Durante el tiempo que paso en el hospital habia estado muerta de miedo, no sabia que haria si le pasaba algo, estaba tan emocionada por el rumbo que nuestra relacion estaba tomando, tan enamorada y se me hacia que estaba por perderlo todo, perderlo a el. Y me asustaba mas que nada en el mundo. Lo amaba tanto que ya no sabia que haria sin el.

- ¿Lista?- Pregunto Nick entrando en mi habitacion.
- Oh, si. Solo termino de ponerme labial.

Pinte mis labios de color rojo, amo ese color en los labios aunque Nick lo detesta solo porque lo dejo todo manchado cuando lo beso, fuera de eso dice que mis labios se ven sexys, una razon mas para amar los labios rojos.

El camino no se me hizo tan largo, no sabiamos a donde iriamos, Nick solo me habia dicho que queria llevarme a su viaje, no queria ir solo y despues de lo de su accidente no lo queria dejar solo tampoco. No me dijo el sitio, ni me dijo como empacar, me podria comprar ropa estando en el lugar. Pero el viaje seria un poquito largo, o eso me habia dicho Nick.

- Ya dime a donde vamos.
- A Hawaii.

Una enorme sonrisa se dibujo en mi rostro, Nick y yo ya habiamos hablado de hacer un viaje a Hawaii y lo preparo todo para mi. Lo abrace y lo bese antes de que el avion despegara. Al parecer la entrega de un anillo no era lo que Nick estaba planeando, pero esta bien, igual el viaje a Hawaii era algo que habiamos tenido que posponer por su accidente, el viaje estaba programado para dos meses atras pero Nick aun no podia viajar y su herida era "reciente".

Cuando llegamos fuimos directo al hotel, era ya tarde y teniamos sueño. Cuando llegamos al hotel me di cuenta de un pequeño detalle, no habia llevado nada para dormir... bueno, siempre podia dormir desnuda o con una camisa de Nick.

- Nick no traje ropa para dormir...
- Puedes dormir desnuda...- Dijo alzando una ceja. - Pero si quieres ponerte algo encima, revisa el armario.
- ¿Eh?
- Tu solo hazlo.

El armario estaba lleno de ropa, prendas ligeras para el clima caliente de Hawaii, bikinis, vestidos de noche y zapatos tambien para cada ocacion.

- ¿Por que tanta ropa? ¿Cuanto nos vamos a quedar?
- Dos semanas.
- ¿En serio? ¿Dos semanas? Eso es... es mucho Nick no podemos estar fuera tanto tiempo.
- Si, si podemos, ademas ya me ocupe de todo, no te preocupes por nada y disfrutemos de nuestras vacaciones.
- Me muero por probarme toda la ropa pero igual te tomare la palabra... para lo que vamos a hacer no se necesita ropa ¿cierto?
- Nop.

Nueve días en Hawaii y ese fue el día mas memorable. No me lo habia imaginado ya que pense que si había posibilidad de regresar a casa con un anillo me lo daría en los primeros días en ese lugar, pero no, habia esperado hasta el noveno día, cuando menos me lo esperaba para que por fin todo pasara.

Ese día nos habiamos levantado temprano, iriamos a otra isla a disque buscar a un futuro socio de Nick, aprovecharia la oportunidad para cerrar un trato, eso es lo que me habia dicho. El se habia ido al hotel en el que segun se hospedaba esa persona y yo me habia quedado sola viendo todo el lugar. Las plantas, el mar, tambien que no habia mucha gente.

Y después de caminar un poco por la orilla de la playa encontré un lugar hermoso, había una mesa preparada, había petos de rosa en la mesa, una botella de champagne, quise salir corriendo pensando que tal vez les podía arruinar la sorpresa a una pareja, incluso había un chico sentado de espaldas a mi, estaba por dar la vuelta cuando se me hizo conocido. Sabia que era Nick.

- ¿Nick? ¿Que es todo esto?
- Una sorpresa, ¿te gusta el lugar?- Se levanto y me ayudo a sentarme.
- Si, es hermoso pero pensé que estabas con un socio y...- El me miro con una sonrisa mientras se sentaba
- Y que en serio había pensando en incluir el trabajo al viaje que te había prometido. Te dije que seriamos solo nosotros dos, ni el trabajo entraba en la ecuación.
- ¿En serio todo esto es solo para nosotros?
- Si, porque tengo algo muy importante que decirte.

Y como si hubiera presionado un botón de pánico las manos me empezaron a sudar, si no me pedía matrimonio saltaría sobre el y lo llevaría a Las Vegas, esto era jugar con las ilusiones de una mujer, ya que siempre que venia algo así de romántico y eso de "algo muy importante que decirte" siempre lo tomaríamos como un "cásate conmigo" o como un "te dejo".

- Desde que te conocí me enamore de ti... bueno esta historia ya te la sabes mejor que nadie. Cuando volví a verte, después de un divorcio, un corazón roto y superando la muerte de mi hijo me di cuenta que te quería en mi vida a largo plazo. No estaba dispuesto a dejar que lo mismo de siempre ocurriera y arruinara todo, planeaba tomarnos tiempo para dar un paso mas en nuestra relación pero... me di cuenta que la vida es muy corta. Cuando paso lo de mi accidente mi ultimo pensamiento estuvo en ti. No te quería dejar, no quería provocarte dolor, quería que todo lo que te había prometido alguna vez, el matrimonio y los hijos pasara, no estaba listo para dejarte y luche por salir con vida del accidente por ti.
- Me dio tanto miedo perderte...- Yo estaba llorando, recordar los momentos que pasamos sin saber como estaba fueron los peores de mi vida.
- Lo se, y por eso no me deje vencer incluso cuando sentía que ya no tenia fuerzas. Estuviste conmigo cada momento después del accidente y en mi recuperación. Tu me ayudaste a seguir Miley y te amo. Quiero tener una vida contigo, no solo ser novios, no vivir juntos, sino ser uno solo, quiero que lleves mi apellido y tengamos hijos... No quiero desperdiciar un segundo mas de vida, me di cuenta que en cuestión de segundos todo puede cambiar, te puedes ir de este mundo y sin haber logrado nada importante en tu vida. Cuando muera quiero hacerlo a tu lado y después de haber tenido cinco hijos... No se, los que vengan pero... quiero que te cases conmigo.- Se levanto de la mesa y saco una cajita roja de su bolsillo, puso una rodilla en la arena y lo dijo, por fin lo dijo.- ¿Te quieres casar conmigo?

Ya me habían preguntado eso mismo una vez y me había sentido la mujer mas afortunada del mundo, pero no se comparaba con lo que se sentía en ese momento, en mi primera pedida de matrimonio ni había llorado, esta vez las lagrimas no me dejaban ver y las palabras no salían de mi boca.

- No.

Si, eso fue lo que dije, tenia que hacerlo sufrir como el lo hizo estos nueve días.

- Por un momento pensé... espera... ¿Dijiste no?
- 9,8,7,6,5.... a la mierda... Si, si me quiero casar contigo.

Nick sonrió un poco y puso el anillo en mi dedo y se levanto un poco para besarme.

- ¿Por que me habías dicho que no?
- Te quería hacer sufrir por los nueve días que pasamos aquí y me hiciste sufrir pensando en este momento. Ya había perdido las esperanzas.
- Por lo mismo lo hice, quería que no te lo esperaras.
- Ahora solo por eso y porque ya me paso una vez yo pongo el plazo para la boda y para meterle presión al asunto, no hay sexo hasta la luna de miel.
- No me preocupo por eso.
- ¿Por que?
- Me tome la libertad de escoger el lugar de la boda.
- ¿En donde sera?
- Aquí mismo. Solo esperaba que dijeras si y confirmábamos todo. Tengo a dos organizadoras para que se dividan el trabajo y claro, a ti para que elijas todo, nos casamos en dos semanas.
- ¿En serio?
- Si. Sabia que estarías nerviosa hasta el día de la boda y ademas yo tampoco quiero esperar mucho, ademas te mentí, aun nos queda un mes y medio de vacaciones. En dos semanas nos casamos, pasaremos una semana aquí de luna de miel y luego iremos a México ¿que te parece?
- Que todo lo tenias ya pensado.
- Cuanto antes nos casemos mejor.

Cuatro semanas después de la propuesta ya era una mujer casada, estaba de luna de miel en un hermoso hotel en Los Cabos, luego otra semana mas en Puerto Vallarta y después veríamos a donde pasábamos el final de nuestra luna de miel. Lo importante era que por fin era la esposa de Nick Jonas.

Pero volviendo al tiempo actual, hoy es nuestro tercer aniversario de casados. y el cuarto de novios, habíamos terminado casados el mismo día que volvimos y no había sido con intención de que así pasara. La mamá de Nick estaba por llegar para cuidar a Christian. Mi hermoso bebe tiene casi dos años, Nick estaba en el séptimo cielo cuando el bebe nació pero también muerto de miedo de que pasara lo mismo que con su otro hijo. A veces incluso sentía como el se levantaba en las noches o no podía dormir preocupado de que le pase algo al niño. Pero ya el niño tenia casi dos años y el riesgo de que pasara lo mismo que con el bebe Adam eran muy escasas ya que la muerte de cuna era presentada mas en el primer año.

- ¿Ya llego mi mamá?
- Búscala debajo de la mesa, tal vez esta escondida porque yo no la veo. No Nick, aun no llega.
- Se nos va a hacer tarde, tenemos reservacion a las siete y media... Debe ser ella.- Yo ni había escuchado cuando tocaron a la puerta.
- No comas mucho cuando veas la película con tu abuela, ayer te vomitaste por eso.- Dije tomando mi bolso y despidiéndome de Christian.
- Si mami.- Pero mientras lo decía me ignoraba por completo viendo la tele. Salí de la casa con Nick y nos subimos al auto.
- Creo que Christian debería dejar de ver tanto la televisión, me ignoro por completo, cuando lleguemos va a estar vomitando por comer tantos dulces.
- Es un niño Miley...
- Lo se.. pero no me gusta que coma tantos dulces y comida chatarra...
- Mami sobre protectora...
- Hmmm pero si tu...

Mi vida no era todo color de rosas, Nick y yo no eramos la pareja perfecta, pero mi familia era todo lo que necesitaba para ser feliz, por fin me sentía completa y sabia que nada podía arruinar mi felicidad, menos ahora que cumplía un año mas siendo la esposa de Nick y cuando estaba a punto de darle la noticia de la llegada de un nuevo bebe. A este paso tendríamos ocho hijos y como treinta nietos a los ochenta años.

FIN
*-*-*-*-*-*-*
El final mas empalagoso que he escrito pero me sentia con ganas de empapar la historia en miel y empanizarla en azucar :)
De vez en cuando Jeny me hara el favor de subir algunas pequeñas cosas como one shots a su blog, tal vez incluso algun dia haga una mini novela ya que mi corazon aun sigue latiendo un poco por Niley las ansias de escribir de ellos me ganan pero no publico nada porque lo dejo a medias o porque simplemente lo escribo para mi propio deleite... a veces me sorprende la cantidad de estupideces que puedo escribir por minuto. LOL.
Las quiero a todas sobre todo a las bitches de Jeny y Magarita :*

miércoles, 11 de junio de 2014

Tù eres mi Amor - FIN



Nicholas no volvió a Claymore durante varios dias, tampoco pasó los dias en brazos de Marie St Allermain como se imaginaba Miley. El se quedó en Londres oscilando entre la ira y la serenidad pensativa, cada noche se reunia con sus amigos en su club.

El tercer dia, mientras miraba distraídamente por la ventana, llegó a algunas conclusiones. Para empezar no tenia ninguna necesidad de mantener una amante, su mujer ciertamente era una ramera, pero tambien era una compañera apasionada, por otra parte tampoco tenia intenciones de llevar una vida de monje ni de quedarse exiliado en el ala este del castillo.

Iba pues a regresar a Claymore House e iba a volver igualmente a sus habitaciones, cuando tuviera ganas haria que 
Miley cumpliera con su deber conyugal. Ella haria las veces de criada y de pu/ta.

Volvió al dia siguiente por la mañana tan inmerso en sus pensamientos que apenas notó el esplendor del verano en el campo. En cuanto llegó fue a la habitación de su mujer y abrió la puerta con estrépito. Ella no estaba, sin dirigirle la palabra a Mary, que estaba asustada, se fue a inspeccionar su propia habitación pero tampoco estaba alli. Mary le explicó llorando que ella se habia ido el dia anterior.

-¿Dónde se ha ido?

-No me lo dijo Vuestra Gracia, pero ha dejado una carta en su secreter.

En el mueble Nicholas solo encontró una bola de papel, a pesar de su enfado, la desplegó por si ella hubiera escrito algo para el, pero el papel estaba en blanco. Habia dejado esta hoja arrugada queria hacerle comprender que sabia la razón de su ira.

-Vuelvo a mis antiguas habitaciones-le anunció a Mary desde la puerta-Quite todas sus cosas.

-¿Y donde debo ponerlas?-preguntó Mary.

-¡Tráigalas aquí por Dios!-gritó el ignorando la sonrisa ironica de la doncella.

No tenia humor para regañarla, tenia demasiadas ganas de matar.

En el pasillo se dijo a si mismo que la bola de papel tenia un aspecto extraño, estaba llena de multitud de gotas de agua o de lágrimas.



Durante varios dias, Nicholas esperó que su mujer regresara, dando vueltas como una fiera enjaulada. Estaba seguro de que ella volveria si se daba cuenta de que el no iba a lanzarse en su búsqueda. Tenia que volver, la ley se lo ordenaba.

El quinto dia todavía no habia vuelto. Nicholas nunca habia estado tan furioso. ¡Ella le habia abandonado! Evidentemente habia vuelto a la casa del imb/écil de su padre.

Se hizo traer el coche sin demora.

-Quiero estar en casa de Martín Stone dentro de seis horas ¿Me ha entendido?-le ordenó al cochero.

Este le habia dicho que 
Miley le habia hecho llevarla hasta el primer cambio de caballos y que luego habia tomado una diligencia. ¡Pequeña idi/ota! ¿Cómo podia comportarse asi cuando llevaba a su hijo?

Su suegro le recibió con los brazos abiertos.

-¡Bienvenido!-dijo abriendo el mismo la puerta del coche-¿Dónde esta mi hija? ¿Y como esta?

-Esta bien, me ha encargado que le diga que estamos esperando un hijo-respondió Nicholas quien no queria alarmar al pobre hombre ni confesar que no sabia donde estaba 
Miley.

En cuanto pudo irse sin despertar sospechas se dirigió a la casa que el habia habitado antes, pero 
Miley tampoco estaba alli. Entonces ordenó al cochero que le volviera a llevar a Claymore. Al dia siguiente se enteró de que su mujer tampoco estaba en casa de los Archibald. Habia desaparecido.

La ira del duque dio paso a la preocupación. Al comprobar que tampoco habia cogido un barco con destino a Francia, fue presa de la angustia.

A lo mejor se habia reunido con el que habia sido su amante antes de la boda. Este pensamiento le puso fuera de si pero solo lo creyó por espacio de un segundo. No podia imaginarse a 
Miley con otro hombre, por la forma en que ella se abandonaba en sus brazos tenia la impresión de que ella habia empezado a amarle.

Nicholas vagaba de una habitación a otra, la casa le parecia vacia sin 
Miley, la única mujer que se habia atrevido a enfrentarse a el.

En su habitación sacó la alianza de su estuche, como no podia esperar a que ella se la pusiera, se la puso el mismo. Sin duda era por su culpa por lo que 
Miley se habia entregado a otro hombre antes de casarse con el. Inclinó la cabeza hacia atrás y suspiró. No podia imaginar la vida sin ella.

Al dia siguiente, Nicholas hizo que ensillaran a Khan y fue hasta el árbol al que habia llevado a 
Miley. Recordó hasta que punto tenia ella miedo de que el le hiciera el amor. Todo eso le parecia ahora muy lejano.

Exactamente hacia ocho meses. Ocho meses...ese era el tiempo que ella deseaba para preparar su boda. Si hubiera estado embarazada, como el creia, nunca hubiera querido esperar tanto tiempo.

El se quiso morir, ahora lo entendia todo. Ella debia de haber intentado hacerle creer que estaba esperando un hijo para obligarle a volver con ella, después habia renunciado a esa estratagema para ir a Claymore House en persona.

Dos horas mas tarde, Emily Archibald recibió una nota muy insistente de parte de Nicholas, que queria verla lo mas deprisa posible en su casa de Londres. Ella fue a la vez curiosa e inquieta y encontró al duque en la biblioteca.

-¿Tenemos que intercambiar cortesías o puedo ir directamente al grano?-preguntó el de entrada.

Un estremecimiento de temor recorrió a la joven, nunca le habia visto tan decidido. El le indicó que se sentara.

-Bueno, vayamos a los hechos. Supongo que querrá saber porque queria hablar con usted.

-¿Por 
Miley?-preguntó Emily dudando.

-¿Dónde esta? No me he puesto antes en contacto con usted porque no queria obligarla a traicionar su confianza, pero no he conseguido encontrarla por mi mismo, asi que me veo obligado a recurrir a usted.

-Pero yo no lo se. Ni siquiera se me ocurrió preguntarle donde iba, no pensaba que se ausentaria tanto tiempo.

Los ojos grises de Nicholas la miraron fijamente intentando saber si ella decia la verdad.

-Tiene que creerme-suplicó ella-Se lo diria si lo supiera.

-Muchas gracias-dijo el suavizándose-Voy a decirle a mi cochero que la lleve.

Emily dudó un momento, todavía intimidada pero feliz al ver que el la creia.

-
Miley me dijo que usted habia encontrado esa carta. ¿Sabe? Al escribirla ella no sabia si debia dirigirse a usted como “señor” o... -se interrumpió al ver el dolor reflejado en su rostro-Lo siento, no deberia haber dicho nada.

-Ya que no hay secretos entre nosotros ¿puede decirme porque escribió esa carta?

-Bueno, ella intentaba salvar su orgullo, no queria perderle. Por supuesto es terrible, nunca deberia haber pensado en algo asi.

-La unica cosa terrible que le pasó, fue que se casó conmigo-cortó el duque.

-Eso no es cierto-dijo Emily con lágrimas en los ojos-
Miley le adoraba... le adora Vuestra Gracia.

-Gracias.

Cuando Emily se fue, el duque se quedó pensando unos minutos, sabiendo que 
Miley le odiaba mas cada segundo que pasaba.



Esa noche, 
Miley estaba cenando tranquilamente en compañía de su suegra quien se preguntaba porque su hijo mayor tardaba tanto tiempo en venir a recuperar a su mujer, Cuando la joven habia llegado a su casa, ocho dias antes, rogándole que la acogiera algun tiempo, habia estado a punto de echarla. Pero Alicia Westmoreland se volvió a ver a si misma a la misma edad, su marido tuvo que ir a buscarla a casa de sus padres para ordenarle que volviera.

Cuanto mas tiempo pasaba, menos comprendia la situación. Parecian tan enamorados el uno del otro...Al llegar el postre se le ocurrió una idea e hizo llamar a su hijo Stephen diciéndole que deseaba verle lo antes posible.

-Me parece que Nicholas no sabe que su mujer está aquí, suponiendo que quiera saberlo-explico a su hijo pequeño al dia siguiente por la mañana.

-Esto me recuerda las historias que se contaban sobre papá y tu-dijo Stephen que ignoraba por completo la disputa de Nicholas y 
Miley.

-Quiero que vayas a buscar a tu hermano, debe estar en Londres. Traele aquí esta misma noche si es posible, menciona la presencia de 
Miley como si pensaras que el lo sabe pero no le des la impresión de que queremos que venga. A Miley no le gustaria.

-¿Por qué no llevar a 
Miley a Londres? Podria hacer circular la noticia de que estoy loco de amor por ella, eso volveria Nicholas completamente loco.

-Stephen no estoy bromeando, esto es muy serio. Esto es lo que tienes que decirle...



Esa misma noche, Nicholas estaba jugando a las cartas en su club cuando, al levantar los ojos, vió a su hermano en la mesa de al lado. Sobre todo no queria que Stephen preguntara por 
Miley, el duque no queria hablarle de ella bajo ningun concepto.

-¿Tienes suerte esta noche?-preguntó Stephen para alivio de su hermano.

-Nos está desplumando-respondió Marcus Rutherford divertido.

-Tienes realmente muy mal aspecto-dijo Stephen.

-Gracias-respondió secamente el duque lanzando sus fichas sobre la mesa.

-Estoy encantado de verle Claymore-dijo William Baskerville mirándole inquieto.

Escarmentado por su última conversación en esa misma mesa, prefirió no preguntar por la duquesa.

-¿Puedo unirme a ustedes?

-Le da igual-respondió Stephen ya que el duque parecia no haber oido-Tambien quiere desplumarle a usted.

Nicholas empezaba a estar molesto con sus bromas continuas, sin embargo ya no soportaba estar solo en su casa, hubiera preferido invitar a su hermano a emborracharse con el.

-No esperaba encontrarte aquí-continuó Stephen-Creia que irias a la pequeña fiesta familiar de mamá.

Stephen simuló haber metido la pata y sacudió la cabeza.

-Lo siento-añadió-Hubiera debido saber que estando 
Miley alli tu no querrias...

Al oir estas palabras Baskerville perdió las reservas.

-Una mujer encantadora la joven duquesa-exclamo alegremente-Presentele mis respetos y...

Se interrumpió al ver la mirada helada del duque quien se levantó despacio.

-Esta vez no la he visto en ninguna parte-aseguró Baskerville.

El duque miraba a su hermano con una expresión en la que se mezclaban la incredulidad, el alivio y otro sentimiento que Baskerville no supo identificar. Luego sin dignarse recoger sus ganancias, ni despedirse de sus compañeros de mesa, se fue.

-La verdad-dijo Brakerville a Stephen-ha metido usted la pata. Estoy en posición de decirle que el duque siente pavor que ella vaya a las fiestas sin el.

-En efecto-confirmó Stephen.



Nicholas solo tardó tres horas y media en llegar a Grand Oak. De modo que 
Miley estaba en casa de su propia madre y esta se habia convertido en cómplice de esta historia.

Cuando el coche se detuvo delante de la entrada, Nicholas recordó que Stephen habia hablado de una fiesta familiar. No tenia ninguna gana de ver a su familia y ademas no estaba vestido de fiesta. Estuvo tentado e decirle cuatro verdades a su madre antes de ir a buscar a 
Miley pero lo pensó mejor.

-Buenas noches Vuestra Gracia-dijo el mayordomo-

-¿Qué es esto?-exclamó Nicholas delante de el sirviente.

Su familia al completo parecia haberse desplazado. Al verle, su madre fue hacia el pero el le dirigió una mirada tal que ella se detuvo en seco.



-¿Dónde esta mi mujer?-le pregunto a un lacayo del primer piso.

Al llegar delante de la puerta, Nicholas dudó, ignoraba cual iba a ser la reacción de 
Miley y lo que le iba a decir, por el momento lo unico que queria era verla. Entró sin hacer ruido y cerró la puerta, Miley le daba la espalda, estaba estirada en la bañera y hablaba con Clarissa.

Nicholas contuvo sus ganas de ir hacia ella y cogerla en sus brazos, desnuda y mojada. No se consideraba digno de hablarle y aun menos de tocarla. Por dos veces la habia tratado con una crueldad de la que ni el mismo se creia capaz, ahora ella llevaba a su hijo y el no se habia preocupado ni una sola vez por su salud. ¿Cómo podia ella no detestarle?

Clarissa levantó la cabeza y vio a Nicholas que se subia las mangas, abrió la boca pero el duque le hizo una seña para que se callara y se fuera. Con desgana le entregó la esponja y salió de puntillas.

Nicholas enjabono suavemente la espalda de 
Miley teniendo cuidado de quedarse donde ella no pudiera verle.

-Es muy agradable Clarissa-dijo ella inclinándose hacia delante.

Normalmente se bañaba sola pero en estos últimos dias, Clarissa le demostraba mas cuidado. 
Miley se levantó chorreando, y cogió sin mirar la toalla que le daba Nicholas. Este le secó el cuello, la espalda y los hombros.

-Gracias Clarissa, terminaré yo. Voy a cenar aquí, después me vestiré para bajar y...

Se dio la vuelta y vaciló al descubrir a ese hombre serio y atractivo que continuaba secándola. Paralizada, se dejo hacer sin decir una palabra. Ella notó que las manos de Nicholas se entretenian en su vientre y sus muslos pero sin acariciarla. Nicholas estaba alli, ya no estaba enfadado, no la tocaba como un marido sino como un criado. El estómago de ella dio un salto.

Las manos de el la obligaron a sentarse, sin una palabra ni una mirada, el empezó a secarle los pies.

-Nicholas.-murmuró ella con la voz rota-No es necesario...

-Si se te vuelve a pasar por la cabeza la idea de dejarme, cualquiera que sea la razón, hare que te encierren en tu habitación dijo el sin levantar la cabeza.

-¿Y tu te quedaras encerrado conmigo?-preguntó ella con voz temblorosa.

El levanto su pie, se lo puso en la mejilla y luego lo besó.

-Si-murmuró

Fue a buscar el vestido de seda azul y la ayudó a ponérselo. Ella dejo que la vistiera como si fuera una muñeca. Después la llevó sin decir nada hasta la mesa donde esperaba su cena. Se sentó y la puso en sus rodillas. 
Miley comprendió que el tenia la intención de darle de comer.

-¡Para!-gritó ella que ya no podia mas.

Escondió la cara en el hueco del hombro de Nicholas.

-Por favor no hagas eso. Hablame. Dime algo.

-No puedo-consiguió decir el-No encuentro las palabras.

La angustia de su marido le hizo sentir ganas de llorar.

-Yo si que las encuentro-dijo ella mirándole con adoración-Fuiste tu quien me las enseñó. Te amo. Te amo.

El le cogió con suavidad la cara entre las manos y la miró a los ojos.

-Yo tambien te amo-dijo con voz ronca.



Las agujas del reloj marcaban la una y media de la madrugada. A la luz de las velas, Nicholas contempló la belleza adormecida que tenia entre sus brazos. Ella dormia con la cabeza sobre su pecho desnudo, el apartó con cuidado un rizo de su mejilla y la apretó mas fuerte.

-Te amo-susurró.

No habia dejado de repetirlo en su mente esa noche. Cada vez que sus labios hambrientos acariciaban su piel, cada vez que ella se arqueaba bajo su cuerpo y llegaban juntos al extasis.

-Yo tambien te amo-dijo 
Miley con voz somnolienta.

-Shh querida, vuelve a dormirte.

El habia querido prolongar su placer el mayor tiempo posible y deseaba que descansara un poco.

-¿Por qué tardaste tanto?

-¿Te he entendido bien?-preguntó el inclinándose hacia ella con aspecto travieso.

Ella al principio pareció desconcertada y luego enrojeció y apartó la cara.

-¿A que te referias?

-A nada...no tiene importancia.

-No te creo-insistió el duque al ver la mirada triste de su mujer.
Miley se arrepintió de haber hecho esa pregunta.

-Marie-soltó sabiendo que Nicholas insistiria en saberlo.

-¿Qué pasa con ella?

-¿Es por ella por lo que tardaste tanto en venir a buscarme?

El la abrazó más fuerte como si eso pudiera amortiguar su tristeza.

-Querida, si tarde tanto es porque nadie supo decirme donde estabas. No podia imaginarme que mi propia madre podria ser tu cómplice.

-Pero yo creia que vendrías aquí en primer lugar.

-Pues no. Pero no he visto a Marie St Allermain si es eso lo que quieres saber.

-¿De verdad?

-Te lo prometo.

-Gracias-dijo ella con los ojos llenos de lagrimas.

-Por favor-respondió Nicholas sonriéndole con ternura-Ahora tienes que dormir mi amor.

Ella cerró los ojos y se pegó a el, con la punta de los dedos ella le acarició la sien y luego su mano bajo por su pecho.

Nicholas notó que su cuerpo reaccionaba e intentó contener la pasión que provocaban en el las caricias de 
Miley. Cuando la mano de ella alcanzó sus caderas, el la sujetó para imedirle ir más abajo. Creyó oir una risa ahogada mientras Miley se daba la vuelta. Sus labios tocaron la oreja de Nicholas.

El la miró mas detenidamente y vio que no estaba dormida y que le miraba con adoración

Con un solo movimiento la hizo ponerse de espaldas.

-Te habia avisado-murmuró con voz ronca.



FIN

Tù eres mi Amor - Cap: 31



El se quedó un rato con los puños apretados, intentando rehacerse, después se pasó la noche bebiendo, buscando un modo de vengarse. Iba a tomar una amante y se dejaria ver con ella, nadie le reprocharia nada en la alta sociedad ya que era muy común tener una. Y Miley no podria salir sola.

Pero esto no era suficiente. Iba a nacer un niño y el deberia darle su nombre. No lo miraria siquiera y le mandaria lejos de Claymore, pero no de inmediato.
Miley intentó poner en orden sus ideas. Nicholas la rechazaba porque ella llevaba en su seno al fruto de su amor pero ¿por qué la hacia responsable del embarazo? Empezó a enfadarse.

-Plancha mi vestido de seda azul-le ordenó a Clarissa-Y haz que me traigan el coche después de la cena. Voy a salir.

Cuatro horas después, 
Miley entró en el comedor, su peinado estaba sujeto con una diadema de zafiros y esmeraldas y algunos mechones de pelo le caian en la nuca. Si tenian que vivir como dos extraños mejor que fuera amistosamente. Pero si Nicholas se creia que podria volver a la cama de su esposa después del nacimiento del niño, la conocia muy poco.

Sin embargo, cuando el se levantó al verla entrar, a 
Miley se le hizo un nudo en la garganta. El era tan seductor...Si al menos hubiera sonreído, ella se hubiera arrojado a sus pies y le habria suplicado. ¿Pero suplicado que? ¿Qué la perdonara por amarle? ¿O por llevar a su hijo?

En el transcurso de la cena, notó varias veces su mirada gris posada en su escote. Parecia cada vez mas enfadado, se preguntó si estaria celoso. Después de todo era la primera vez que salian el uno sin el otro.

-¿Te gusta mi nuevo vestido?-preguntó ella cuando el la miró de nuevo.

-Es perfecto si tu intención es enseñar tus encantos a todo el mundo-dijo el con cinismo.

-¿Estas cómodo en tus nuevas habitaciones?

Nicholas apartó el plato como si la conversación le quitara el apetito y luego se levantó.

-Estoy mucho mejor que antes-dijo.

Sin decir nada más salió del comedor. Unos minutos después 
Miley oyó que su carruaje se iba. Ella se sentia enferma de tristeza pero de todos modos fue a la fiesta de los Wilson donde se quedó hasta medianoche esperando que eso incitaria a Nicholas a acompañarla la próxima vez.

Se quedó dormida en el coche al volver a casa y se despertó sobresaltada cuando se detuvo delante de Claymore House. Nicholas acababa de llegar y subieron las escaleras juntos, 
Miley se percató de que el tenia las mandibulas apretadas.

-Si sigues llegando tan tarde todo Londres va a empezar a murmurar.-dijo el con voz tensa.

-No podre salir cuando se empiece a notar el embarazo-dijo ella aparentando despreocupación-De todas formas me he divertido muchísimo y no me he dado cuenta de que pasaba el tiempo.

A ella le pareció oir un juramento.



A la mañana siguiente, 
Miley fue a los establos y se negaron a darle un caballo. El mozo de cuadras le dijo que eran ordenes del duque. A pesar de su enfado se dio la vuelta sin decir nada y se dirigió hacia la casa con paso decidido. Entro en el despacho de su marido sin llamar. Estaba reunido con un grupo de hombres que enseguida se levantaron, Nicholas lo hizo con desgana.

-Les pido que me perdonen señores-dijo con una sonrisa angelical-No sabia que mi marido tenia visita-Se dirigió hacia el duque-Acaba de haber un malentendido en los establos, nadie parece comprender que Khan es mi caballo ¿Tengo que recordárselo yo o prefieres hacerlo tu?

-No puedes montar ese caballo-respondió Nicholas con voz amenazadora.

-Siento haber interrumpido la reunión-dijo 
Miley roja de vergüenza por haber sido humillada de ese modo por su marido delante de extraños.

Nicholas evidentemente queria privarla de todos los placeres de su vida, se fue de nuevo hacia los establos y lanzó al mozo una mirada cargada de tanto desprecio que el se apartó para dejarla pasar mientras ella se dirigia a la cuadra de Khan. Ella misma ensilló al caballo, sintiéndose cada vez mas segura, sabiendo que nadie se atreveria a impedirle el paso.

Se paseó durante tres horas con Khan. Al cabo de una hora ya estaba cansada pero no se atrevió a volver. Nicholas se iba a poner furioso cuando supiera que habia desobedecido sus ordenes, sabia que su proximo encuentro iba a ser terrible pero no esperaba encontrarle en los establos, hablando con despreocupación con el mozo y apoyado en la barrera. Interiormente debia estar hirviendo de ira.

Cuando ella pasó a su lado, el estiró una mano y cogió las riendas de Khan.

-Baja-le ordenó con un tono que no admitia réplica.
Miley penso por un momento en darse la vuelta y salir galopando pero el se adelantó.

-Te lo advierto, no intentes escapar.
Miley notó que le ardian las mejillas y sus manos empezaron a temblar. Tragó con esfuerzo y extendió los brazos.

-¿Puedes ayudarme a bajar?

-¿Cómo te has atrevido a desobedecerme?-le preguntó el llevándola lejos de los criados.

En cuanto estuvieron lo bastante lejos como para que no les oyeran, ella se liberó.

-¿Desobedecerte?-dijo ella con rabia-¿Me estas recordando el juramento de la boda? Entonces dejame que yo te recuerde los tuyos.

-Es la última vez que te aviso. Digamos que es un consejo.

-Si tuviera necesidad de consejos, eres la última persona a la que se lo pediria-contestó ella con los ojos brillantes de cólera.

-Desafiame una vez mas y hago que te encierren en tu habitación hasta el parto.

-Estoy segura que solo esperas una excusa para hacerlo dijo 
Miley-Eres el hombre mas malvado, mas cruel...y un mentiros además. Me dijiste que me amabas y mira como me tratas. Y dejame que te diga algo: Los niños se hacen haciendo el amor.

Nicholas se sintió tan extrañado que no vió venir la bofetada. Instintivamente ella retrocedió como si fuera una diosa enfurecida.

-¡Vamos, devuélveme la bofetada! Quieres hacerme daño ¿Qué pasa ya no quieres torturarme? Entonces lo haré de nuevo.

Nicholas le retorcio el brazo detrás de la espalda y la atrajo hacia el.

-Solo eres una intrigante, hermosa y malvada-dijo-Por una vez en tu vida dime la verdad, te prometo que la respuesta no me afectara tanto si contestas “no lo se” como si dices “si”, me dará lo mismo.

-¿Lo prometes? ¿Igual que has prometido tantas cosas antes? ¿Cómo tu promesa de no hacerme sufrir por ejemplo? Tu palabra no vale...

-¿Este niño es mio?-cortó el duque apretando más fuerte.

Los ojos de 
Miley se entrecerraron, se quedó boquiabierta frete a una pregunta como esa y sus ojos se llenaron de lagrimas de furia.

-¿Tuyo?-repitió ella.

De pronto se dejó caer contra el sacudida por los sollozos. Nicholas le soltó la muñeca intentando apartarla. Pero tenia todavía mas ganas de consolarla, de aliviar el dolor de su corazón. Ella le cogia de las solapas con la cara contra su pecho mientras repetia:

-¿Tuyo?

Nicholas le puso las manos en los brazos y la apartó, sin ternura pero sin brutalidad. Entonces ella levantó la cabeza y el vió que ella ya no lloraba, al contrario, se estaba riendo. Seguia riendo cuando le dio una nueva bofeteda antes de huir corriendo hacia la casa.

Nicholas la siguió con la vista y luego fue a encerrarse en su despacho. Se sirvió algo de beber, ahora ya tenia dos cosas claras: 
Miley tenia una buena derecha y el niño era suyo.

Incluso si ella le habia mentido en las razones para casarse con el, su mirada no podia mentir. El niño era realmente de el, ella no habia visto a su amante cuando iba a Londres.
Miley por su parte, se decia que su marido habia perdido la razón, y que ella tambien se volveria loca si se quedaba con el. Sin embargo se habia sentido feliz al estar en sus brazos a pesar del dolor que el le habia provocado al retorcerle el brazo.

Sabia que tenia que abandonarle pero ¿dónde podia ir? Sus tios la ayudarian sin duda, ella se iria con ellos a Francia pero solo les daria explicaciones cuando llegara. Se sentó delante de su secreter, abrió el cajón y vió una bolita de papel. Al mirarla detenidamente, reconoció su letra y la alisó.

Descubrió entonces que era la carta que nunca le habia llegado a enviar a Nicholas. Alguien debia haberla leido, pero no sabia quien. Solo Mary y Clarissa entraban en su habitación, pero ellas nunca se habrian atrevido a revolver en su escritorio.

Se sintió molesta ante la idea de que alguien hubiera leido la carta, cuando dos dias antes ella habia dejado con mucho cariño sobre ese mueble el pequeño trajecito bordado. Nadie aparte de Nicholas habia...¡Dios mio!

Era ella quien habia enviado a Nicholas a buscar la carta de su tia, y el habia encontrado esta. Se imaginó su reacción, debia haber creido que ella se queria casar con el porque estaba embarazada. Debia creer que la carta estaba dirigida a otro hombre. Estaba herido y celoso.

-¡Que tonto!-exclamó 
Miley en voz alta.

Tenia ganas de bailar de alegria, Nicholas no rechazaba a su hijo. Sin embargo ella tenia ganas de matar a su marido. Una vez mas el no habia confiado en ella y se vengaba sin dejarla explicarse. Esa iba a ser la última vez que iba a actuar asi. ¿Quién se creia que era? El tenia que dar explicaciones y para eso ella tenia que empujarle hasta el limite.

Sonrió, tenia que actuar con habilidad, los Cliffton daban una fiesta, no sabia si Nicholas tenia intenciones de ir, en cuanto a ella la decisión ya estaba tomada.



Se vistió con un magnifico vestido de tafetán esmeralda que habia comprado en Paris durante el viaje de novios, era el vestido mas atrevido que habia llevado en su vida, sonriendo, escogió las joyas que se pondría.

-¿Qué tal estoy?-le preguntó a Clarissa.

-Tan desnuda como el dia que nació-decretó Clarissa con reprobación.

-Admito que es un poco escotado-confesó 
Miley guiñando un ojo-No creo que mi marido quiera que vaya a una fiesta sin el con este aspecto.
Miley hizo su entrada en el salón con un ruido de seda, Nicholas se estaba sirviendo una copa, magnífico con su tarje azul oscuro que realzaba sus anchos hombros. Al descubrir el vestido de su mujer, le lanzó una mirada llena de ira, que se detuvo en la blanca piel de su escote.

-¿Dónde vas a ir?-preguntó en voz baja.

-¿Cómo?-respondió su mujer-Prometimos ir a casa de los Cliffton esta noche. Me gustaria tomar un poco de vino por favor-añadió con una sonrisa lánguida.

-Es una pena-dijo el cogiendo una botella de vino-ya que no vamos a casa de los Cliffton.

-¿De verdad?-dijo 
Miley acercándose a el para coger su vaso-Es una pena, siempre he pensado que las fiestas en casa de los Cliffton eran la mas...

-Yo no voy a casa de los Cliffton-la cortó Nicholas sentándose en el borde de su escritorio-Y tu no vas a ninguna parte. ¿Esta claro?

-Tus palabras estan muy claras.
Miley se dirigió al comedor abatida. La cena se desarrolló en silencio opresivo. Miley miraba furtivamente a su marido, sus ojos se posaron en la mano de el y se dio cuenta de que ya no llevaba el anillo que simbolizaba su unión. Levantó los ojos y vió que el sonreia al leer la decepción en su rostro. Furiosa, decidió que iria a la fiesta con su permiso o sin el.

-Me voy a mi habitación-anunció antes del postre.



Era mas de la una de la madrugada, pero la hora no era demasiado importante en el club de Nicholas. Estaba jugando distraido sin darse realmente cuenta de lo que pasaba alrededor de el.

A pesar del alcohol que habia bebido, no conseguia quitarse a 
Miley de la cabeza, esa bruja le habia encantado y le habia vuelto loco de deseo esta noche con su vestido esmeralda. ¿Cómo podia desafiarle asi y montar a Khan? El habia dado la orden varios dias antes para no poner en peligro a su hijo.

-Es un placer verle-dijo William Baskerville sentándose en la mesa del duque-De hecho estoy bastante sorprendido.

-¿Por qué?-preguntó Nicholas.

-Acabo de ver a su mujer en casa de los Cliffton, pensaba que estaria usted alli. Esta encantadora esta noche-el duque le lanzó tal mirada que Baskerville se vió obligado a rectificar-Ella esta siempre encantadora.

Nicholas palideció y Baskerville se preguntó en que podia el haberle molestado.

-Todo el mundo la encontró muy hermosa-añadió mirando a los otros jugadores-llevaba un vestido del mismo color que sus ojos, tuve que esperar mi turno para saludarla porque estaba rodeada de un montón de jóvenes y de viejos fósiles como yo.

Nicholas hizo una señal con la cabeza a sus compañeros de juego y dejó la sala sin decir una palabra. Los cuatro jugadores casados intercambiaron sonrisas de complicidad, Baskerville, el único soltero, parecia inquieto.

-Es increíble ¿han visto la mirada que me ha dirigido? ¿Creen ustedes que llevan suficiente tiempo casados para haber empezado a pelear?

-Bajo mi punto de vista-dijo Marcus Rutherford-asi es desde hace unos minutos.



Era casi de dia cuando 
Miley subió la escalera de mármol. Habia echado terriblemente de menos a Nicholas esa noche, necesitaba desesperadamente su mano alrededor de su cintura, su mirada acariciadora y la alegria de saberle cerca de ella. Estuvo tentada de llevarle la carta y explicárselo todo pero si lo hacia ¿qué pasaria la próxima vez? Esta noche ella le habia desobedecido esperando que eso provocara un enfrentamiento.

Al abrir la puerta de su habitación se sobresaltó, el la estaba esperando sentado en un sillón con los guantes encima del muslo. Instintivamente hizo ver que no se habia dado cuenta de su presencia y empezó a desabrocharse el vestido.

-Sigue vestida-ordenó el-hasta que me vaya.
Miley se dio la vuelta, asustada por la rudeza de su voz. El se levantó y fue hacia ella con la agilidad de un felino, ella estuvo a punto de retroceder pero se contuvo.

-¿Te acuerdas de lo que te prometi que haria si me desobedecias?-dijo el con tono helado.

-Si-dijo ella con voz temblorosa-Me acuerdo de muchas cosas, como de las palabras que murmurabas cuando estabas en lo mas hondo de mi y...

-Silencio, si no voy a...

-Recuerdo exactamente el contacto de tus manos en mi piel...

El la cogió por los hombros y la sacudió tan violentamente que su cabeza cayó hacia atrás.

-¡Por Dios te he dicho que te callaras!

-No puedo, y no puedo porque te amo. Amo tus ojos, amo tu sonrisa y...

Nicholas la atrajo brutalmente hacia el y la beso salvajemente como para castigarla. Le lastimaba los labios y la apretaba tan fuerte que ella apenas podia respirar, Pero a 
Miley le daba igual, ella sentia la intensidad de su deseo contra su vientre, le pasó los brazos alrededor del cuello y se apretó contra el.

Después Nicholas la apartó con violencia. La miraba, jadeando y con tanto dolor que ella estuvo a punto de ir a buscar la carta y explicárselo todo.

-Estoy de acuerdo en quedarme encerrada aquí tanto tiempo como quieras-dijo ella levantando la barbilla con orgullo-con la condición de que tu te quedes encerrado conmigo. De lo contrario nada ni nadie podrá obligarme a quedarme aquí. Quemaré la casa si es necesario.

Nicholas tardó unos segundos en reaccionar. Ella era tan hermosa, tan joven y tan vulnerable, estuvo a punto de sonreir pero recordó que se enfrentaba con una intrigante.

-Si te atreves a dejar la propiedad sin mi permiso-dijo-recordarás con agrado la ternura que te demostré la primera vez que te traje aquí.

Ese beso brutal habia demostrado a 
Miley que el todavía la deseaba.

-Languidezco ya-dijo enrojeciendo-de todas formas te pedire permiso antes de dejar la propiedad.

-
Miley oyó que se cerraba la puerta, este enfrentamiento la habia destrozado, sabia que estaba jugando con fuego, no podia correr el riesgo de que el la echara, tenia que quedarse cerca de el para atizar su deseo, quizá asi saldria de su silencio.

Nicholas no podia conciliar el sueño, habia comprendido que 
Miley solo habia querido reconquistarle para darle un nombre al niño que esperaba, la razón le decia que ya no podia haber anda entre Miley y el pero su cuerpo estaba atormentado por un deseo incontrolable. El alejamiento era una solución, pero en este caso se trataba tambien de su hijo y tenia que estar cerca por si habia complicaciones. Entonces decidió instalarse en su residencia de Londres donde podria satisfacer sus instintos. Era suficiente con que saliera con Miley unas semanas mas, después su embarazo la retendría en casa y el podria dejarse ve del brazo de quien quisiera. Los hombres de la alta sociedad se limitarían a reirse. Esta perspectiva le dio al duque un placer perverso.



A la mañana siguiente, 
Miley redactó con cuidado una nota para Nicholas en la cual le explicaba que los padres de lord Archibald celebraban su aniversario de boda y que ella le habia prometido a Emily que estaria en la fiesta. Añadió que le gustaria mucho que la acompañara. Le dio la nota a Clarissa y luego se paseó impaciente mientras esperaba la respuesta. Cuando llegó esta decia simplemente “Preguntale a mi ayuda de cámara si debo ponerme el smoking”. Ella estuvo a punto de gritar de alegria.

Esa noche se preparó con el mayor cuidado y eligió entre sus joyas un collar y unos pendientes que no habian pertenecido a la familia Westmoreland.

Nicholas esperaba en el salon blanco y dorado con un vaso de whisky en la mano, mirando distraídamente por la ventana. 
Miley hizo su aparición con un brillo malicioso en los ojos. No tenia ninguna intención de quitarse el chal que cubria prudentemente su pecho hasta que hubiera llegado a casa de los Archibald.

El trayecto se desarrolló en silencio, 
Miley imaginaba la reacción de su marido cuando descubriera el atrevido escote. Si no le gustaba el vestido esmeralda, desde luego que tampoco iba a apreciar este.

-Hacemos juego-hizo notar 
Miley cuando llegaban a su destino mientras Nicholas la ayudaba a bajar.

-¿Qué quieres decir?

-Nuestros trajes hacen juego-explicó ella inocentemente.

Con un gesto despreocupado, 
Miley se quitó el chal mientras entraban en la casa.

-No veo...-Nicholas se quedó inmóvil al ver la garganta desnuda de 
Miley-¿Intentas averiguar hasta donde puedes llegar con tu provocación?-preguntó apretando las mandibulas.

-No Vuestra Gracia-respondió ella consciente de las miradas interesadas de los demás invitados-¿Cómo podria provocarle mas de lo que ya he hecho dándole un hijo?

-Voy a darte un consejo-dijo con acidez-Esta noche mantente en tu lugar.

-Por supuesto-prometió 
Miley viendo que el no podia apartar los ojos de sus pechos hinchados bajo su ropa-Es lo que queria hacer pero no habia suficiente sitio para mis labores en mi bolso de mano.

Ella agitó un pequeño bolso adornado con perlas y gimió de dolor cuando la mano de Nicholas le apretó el brazo.

-Aprovecha bien esta noche dijo el-porque es la última a la que vas a asistir. Te quedaras en Claymore hasta el nacimiento del niño. En cuanto a mi, yo me instalaré en Londres.

Todo el optimismo de 
Miley desapareció, intentó soltar el brazo.

-Entonces ahorrate la vergüenza de dejar la marca de tu desprecio en mi brazo-dijo ella.

El la soltó como si no hubiera sido consciente de que la estaba sujetando.

-El dolor al igual que el amor es una cosa que se comparte-dijo pasando delante del mayordomo.

Al entrar en el salón, 
Miley se dio cuenta de que algo no iba bien, todo el mundo parecia demasiado normal, como si la gente estuviera haciendo esfuerzos por parecerlo. Cruzó su mirada con lord Easterbrook pero evitó su compañía.

Emily le explicó la razón de esa extraño ambiente.

-Mi suegro es realmente raro a veces. No podia creer a mis oidos cuando mi habló de los esfuerzos que tuvo que hacer para que viniera para dar una alegria a mi madre.

-¿De quien estas hablando?-preguntó 
Miley presintiendo una catástrofe.

-De Marie St Allermain la cantante. Esta aquí. Mi suegro hizo de todo para que viniera a cantar esta noche. Tiene que cantar mañana por la noche y...
Miley no oyó lo demás, todo su cuerpo empezó a temblar al recordar a la antigua amante de Nicholas. Ella estaba alli y Nicholas acababa de anunciarle su intención de instalarse en Londres.

El gran salón estaba lleno de gente, con el rabillo del ojo vio a Nicholas mientras el pianista se sentaba y los músicos afinaban sus instrumentos. La tensión estaba en su punto más alto.

Nicholas se dirigió hacia su mujer, los invitados se apartaron para dejar a la pareja que se situaran en la primera fila. 
Miley conservó un brazo bajo el de su marido ya que se sentia morir.

-Marie St Allermain tiene una voz única-murmuró un anciano a Nicholas.

La joven notó que los músculos del duque se tensaban bajo sus dedos y que luego se relajaban, comprendió que el ignoraba la presencia de la cantante. Esta tan atractivo esta noche-se dijo con lagrimas en los ojos.

Marie St Allermain entro a su vez y se colocó con gracia al lado del piano. 
Miley no podia apartar su mirada de esta mujer dotada de un magnifico cuerpo. Cuando empezó a cantar, Miley tuvo la sensación de que el salón empezaba a girar a su alrededor. Marie tenia una voz sensual y envolvente.
Miley se sintió a la vez inútil, pueril y enferma, ahora sabia ya lo que significaba ser la amante de Nicholas, estaba a punto de desmayarse, después de todo Nicholas habia roto con esa mujer para cortejarla a ella, pero eso habia sido antes, ahora el la odiaba, y además su vientre pronto estaria abultado.

Hubiera querido morirse y no se dio cuenta de inmediato de que la amo de Nicholas acababa de posarse en la suya palida y helada y que ella apretaba sus dedos buscando consuelo. Entonces, enlazó los dedos con los de su marido. Al fin pudo respirar pero por poco tiempo. Mientras la cantante respondia a los aplausos con una inclinación de la cabeza, su mirada se cruzó con la de Nicholas y una chispa paso entre ellos. 
Miley creyó que se le saldria el corazón del pecho.

Poco después empezó el baile, Nicholas se quedo unos minutos a su lado sin hablarla ni mirarla, pero estaba ahí, y 
Miley se dijo que quizá eso fuera una señal de reconciliación. Luego el la llevó hacia la pista de baile.

-¿Dónde está tu anillo de boda?-preguntó con tono helado mientras bailaban un vals.

-¿De que anillo estas hablando?

-Lo sabes muy bien.

-Dado que era una prueba de amor y que ya no me amas, seria hipócrita si la llevara-dijo ella esperando que el lo negara.

-Haz lo que quieras-dijo el-como haces siempre.

Luego se quedaron uno al lado del otro esforzándose por tomar parte en las conversaciones. De repente el grupo se puso incómodo, 
Miley volvió la cabeza y vió a Marie St Allermain que se acercaba a ellos del brazo de lord Easterbrook.

-¡Claymore!-dijo este con una alegria forzada-Creo que no hace falta que les presente.

Todas las miradas se posaron en el duque, mientras el se daba la vuelta. 
Miley oia alrededor de ella los murmullos y las risas ahogadas. Todos parecian estar esperando el enfrentamiento entre las dos rivales. Solo Nicholas y Marie parecian divertirse con la situación.

Nicholas se llevó la mano de Marie a los labios con una sonrisa desenvuelta.

-Veo señora, que le basta con entrar en un lugar para tener a todos los hombres a sus pies.

-No todos-respondió ella con un brillo malicioso en los ojos-Dicho esto, Vuestra Gracia, me sentiria muy extrañada si os viera un dia en una situación tan ridícula.

Miley les odiaba a todos. De repente Easterbrook se dirigió a ella para presentarle a la amante de su marido. Fortalecida por la ira, ella sostuvo la mirada de Marie y con un perfecto francés le dijo: -Gracias por habernos deleitado con su maravillosa voz. Me ha gustado mucho escucharla.

-La mayor parte de los cumplidos que se hacen sobre la belleza de las mujeres son exagerados-respondió la cantante con una sonrisa- En lo que a usted concierne veo que no exageraban-dirigió una mirada provocativa a Nicholas antes de añadir-Y lo siento.

Con estas palabras, volvio a coger el brazo de Easrerbrook y se alejó. 
Miley sabia que a su marido le habia gustado su actitud, pero unos minutos después vió a Nicholas y a Marie ir a la terraza por puertas diferentes. A Miley no le extrañó demasiado, ya que habia sorprendido su mirada de connivencia.



Marie extendió sus manos hacia el duque bajo la luz de la luna.

-Estoy muy feliz de volverte a ver Nicholas. Easterbrook debe odiarte para haber provocado este encuentro.

-Es una basura-dijo el sonriendo.

Contempló su belleza y el brillo de sus ojos azules.

-Se diria que el matrimonio no te sienta bien.

Nicholas se tensó, sabia que si retomaba su relación con Marie, las murmuraciones llegarian hasta 
Miley quien sufriria terriblemente. Marie era una amante apasionada pero el duque todavía podia notar la mano helada de Miley en la suya mientras la otra cantaba. Debatiéndose entre las dos con su conciencia, decidió que era mejor buscar otra amante.

-El matrimonio tampoco le sienta bien a tu mujer-continuó Marie-Es muy hermosa pero tambien muy desgraciada.

-El matrimonio nos sienta bien a los dos-rectificó Nicholas-Estas equivocada.

-Si tu lo dices...

-Es la verdad-insistió el irritado ante la idea de que todo el mundo fuera testigo de sus desavenencias.

-En ese caso-dijo Marie, de la cual el duque siempre habia apreciado su perspicacia-es mejor que vuelvas al salón. Creo que Easterbrook esta intentando acercarnos de nuevo con la esperanza de consolar después a tu mujer-Vió que los hombros de Nicholas se tensaban y que sus ojos lanzaban rayos-Nunca te habia visto tan atractivo. Eres irresistible cuando estas enfadado...y celoso.

-Simplemente estoy enfadado-dijo Nicholas inclinándose ante su antigua amante.

Al volver al salón, buscó a Easterbrook con los ojos y después a 
Miley. Easterbrook estaba alli pero no su mujer. Se sintió aliviado al comprobar que nadie parecia haberse dado cuenta de su encuentro con Marie. Miley podria seguir mirándoles a todos con la cabeza alta.

Pero el mayordomo le anunció que la duquesa se habia ido. ¡Pequeña tonta! No podia volver al baile sin ella sin despertar la curiosidad de los demás. A el le daba igual pero seria 
Miley quien sufriria las consecuencias, sin duda por eso se habia ido y el e estaba obligado a quedar se ya que ella se habia llevado el carruaje.

Emily y Michael hicieron venir al suyo y sin hacer preguntas, aceptaron acompañar al duque hasta se residencia de Londres donde pasó una noche difícil. La imagen de 
Miley y de su atrevido escote no se le iba de la cabeza, ella habia intentado provocarle y el se habia pasado la noche viendo como los demas hombres la devoraban con los ojos.

Si ella no se hubiera comportado asi, el jamás se habria reunido con Marie en la terraza.