Miley: creo que tu amigo esta enfadado.
Nick: se le pasara, espera que vea el filete que le pienso dar…
Miley: eso es soborno. Elvis yo lo dejaría sufrir un poco más.
Nick: no te preocupes que lo hará, por cierto tu vecina me odia.
Miley: ¿Sandy? ¿Por qué? ¿te conoce?
Nick: hace unas horas estaba llamando a tu puerta pero creo que me excedí un poco, ella salió y me llamo “chico importante” antes me dijo que “hacia el imbe:cil”
Miley: detesta el ruido, el chico del piso de arriba hace fiestas de rock pesado y lo detestamos juntas.
Nick: le enviare una canasta de perdón.
Miley: consíguele un autógrafo de Joe y te perdona.
La mención de su hermano le amargo el momento, si conseguía un acuerdo de no nombrar nunca mas Joe podían estar relativamente en paz, el juraría olvidar todo si ella dejaba de nombrarlo y hacer como si nada pasaba.
Nick: tu y yo hablaremos de Joe en algún momento Miley pero ahora no creo ser capas, es mejor que no lo saques en cada momento.
Miley: no te comprendo y para ser sincera…
Nick: déjalo Miley, lo se todo. No hablemos de eso ahora. ¿Pedimos comida mexicana?
Miley: demasiado picante y no he comido nada en todo el día… mejor pizza.
Terminaron comiendo juntos en la alfombra de la sala, abrazados y con Elvis acurrucado junto a ella, vieron algo de tv pero no había nada interesante.
La vio bostezar, se refregó los ojos y siguió mirando la tv, con una sonrisa la cargo, ella soltó un gritito, pero se agarro a su cuello y la dejo llevarla al cuarto, el apartamento de Miley era parecido al suyo, no en estructura pero si en decoración, la tercera puerta que abrió era el cuarto, la recostó, Miley se acomodo de forma graciosa…
Ella rápidamente, se levanto y desapareció por una puerta, el se quito los zapatos, no quería desvestirse, no le parecía correcto, pero Miley apareció sin los jeans, una camiseta diminuta de algodón blanco, sin mangas, una braguitas celestes, destacaban por su vivo color, ella salto sobre la cama y se metió bajo las colchas.
Miley: apresúrate, quiero abrazarte… es relajante, esta tarde me dormí al instante.
El dudaba si podría dormir, dios no podía estar excitado, era imprudente, era un cretino, como podía excitarse después de lo que paso, la miro y los ojos se le fueron solos a la camiseta, diablos Miley debió quedarse con el brasier, se quito el jeans y la camisa, quedo en una sudadera negra y por suerte iba en bóxer, gris su color favorito, se metió en la cama y ella se acurruco a su lado, cruzo un brazo en su barriga y apoyo la cabeza en su hombro, le beso la mejilla y cerro los ojos, el apago la luz con una mano y estuvo mucho tiempo intentado controlarse, cada vez que se movía ella se acomodaba a su cuerpo y frotaba su cuerpo contra el suyo, sus pechos en contacto no lo ayudaban a controlarse, ni la pierna que tenia entrelazada con las suyas, diablos esto era penitencia, cerro los ojos y obligo a su respiración a controlarse, obligo a su mente a estar en blanco hasta que logro conciliar el sueño… un perro ladro, su perro ladro ¿en el edificio de Miley se podía tener mascotas?
La vecina lo odiaría todavía mas, su perro ladraba a altas horas de la noche si alguien pasaba por el pasillo, alguien que vendría de una fiesta seguramente… cerro los ojos cuando su perro no siguió ladrando, un solo ladrido, si volvía a ladrar tendría que levantarse y ver que pasaba o despertaría a todo el edificio, no quería, estaba tan cómodo… diablos, detuvo el movimiento de su mano, Miley estaba de espaldas a el, pero pegada a su cuerpo y el tenia una pierna entre las de ella, debía moverse por que tenia una tremenda erección y estaba pegada a ella, pero eso no era todo, su mano estaba bajo la camiseta de ella, estaba sobre un delicioso pecho, y con el pulgar seguía el contorno de un erguido pezón, retiro la mano lentamente y se giro hasta quedar de espaldas, diablos el deseo contenido dolía, por decirlo de una forma suave, ella se giro medio dormida medio despierta, apoyo su cabeza en su hombro, con los labios en su cuello, contuvo la respiración ella se acomodaba y rozaba su cuerpo, sus pechos contra el, ella bajo la mano y rozo su erección sin darse cuenta, metió la mano bajo su sudadera y lo acaricio un poco, subió una pierna en su cadera y lo estaba volviendo loco, no debía hacer eso con un chico en esa tensión, cerro los ojos hasta que ella se quedo quieta, luego lentamente el le quito la mano de su cuerpo, bajo la pierna e intento ponerla de espaldas pero ella abrió los ojos, ojos soñolientos.
Miley: ¿Qué haces?
Dijo en un bostezo. Dios era hermosa a la luz de la luna, se desperezo mientras lo miraba, el cerro los ojos respiro hondo y la miro a los ojos.
Nick: te pegas mucho mientras duermes…
Miley: ¿y eso te molesta?
Nick: no como piensas…
Miley: ¿Cómo?
Nick: Miley intenta dormir.
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