lunes, 1 de agosto de 2011

Recuerdos: cap 6

 Escrito por: Rosser
Adaptado por: Jeny




-          Tu hermana decía lo mismo. Y mira lo que le pasó.

Selena puso expresión pensativa.

-          Aún estoy intentando averiguar quién fue la persona que la mató. – sonrió de nuevo – se que tu no fuiste, nunca haces daño a una mujer si no es en autodefensa. Y menos la matas. – entrecerró los ojos. – Estoy en la duda de si es tu estúpida novia. –
Luego negó con la cabeza – No, no puede ser… es tan mosquita muerta. ¿Qué sabrá ella sobre armas y guerras? Completa cursi. De veras, no pegáis, para nada.

Nick agarró a Selena del cuello, sin aguantar más de la rabia.

-          No vuelvas a nombrarla. – la estriñó fuerte contra su puño. – Ni se te ocurra volver a insultarla. Te mato. – la levantó aun más, por encima de su cabeza.

Selena golpeó con las piernas el pecho de Nick. Pero a él le dio igual. La soltó. Ella cayó al suelo.

-          No sabes de lo que soy capaz, Selena. No me subestimes.

-          Nunca lo… hice. – dijo ella tosiendo, a la vez que sonreía.

-          Estás loca.

Selena hizo caso omiso al comentario de Nick y siguió con lo que estaba, hacía unos minutos.

-          Hey, deja eso. – dijo Nick, acercándose a ella, ya que estaba ojeando folios del escritorio de Miley.

-          Tranquilo, solo quiero saber con quién estás. – dijo, volteando una de las hojas que tenía en mano. – Y la verdad es que no es muy interesante… - Nick la miró mal. – es cierto, cariño, te repito, no sé qué haces con esta mujer…

Selena se rió, descaradamente, de nuevo.

-          Y pensar que me la podría cargar ahora mismo. – cogió una pistola que llevaba en el liguero, subiéndose un poco la falda negra, mostrando con desinterés aquel par de muslos generosos… que Nick había acariciado tantas veces. – Dejarle las cosas claras… quien manda aquí… y a quien le perteneces. – a mí.

-          Deja la pistola, por dios, Selena… - Nick suspiró – estás loca ¿lo sabías?

-          No piensas así, en el fondo.

Nick rió.

-          Venga, basta de tonterías… vete, no pintas nada aquí.

-          ¿Nada? Soy clienta de tu novia. Creo que tiene que atender a cualquier persona, además, ella no me conoce. – miró a Nick ladeando la cabeza - ¿O sí? ¿Le has hablado de mi alguna vez? Seguro que si meto la mano en el fuego, no me quemo. –

-          No. – mintió Nick – no sabe quién eres. ¿Para qué debería hablarle de alguien tan insignificante?

-          Cállate, mentiroso. ¿Tan insignificante? Recuerda que he sido a la mujer que más has amado, o, si no recuerdo mal, como tu solías decir, a la única que has amado.

-          Me he dado cuenta de que ni una ni la otra. Miley es la que encaja en
ese papel.

-          ¿En qué papel? ¿El de princesita? Por dios Nick, ¿des de cuando te va ese rollo?

-          Ella es perfecta.

-          No. Vosotros dos no pegáis ni con la goma más fuerte. – entrecerró los ojos – mírate. Eres demasiado hombre para una joven así.

-          ¿Así como? – Nick se sentó en la butaca de en frente de Selena.

-          Pues… así… - se sentó a horcajadas encima de los muslos de Nick. Él se opuso, pero Selena se salió con la suya – a la que le falta de esto… - cogió la mano de él y la pasó por su sien – y de esto. – ahora la llevó, directamente hacia uno de sus pechos, bajando por la curva del vientre, hasta su trasero.

-          Mile…

Un portazo sobresaltó a Nicholas y a Selena. Él se giró. Se levantó de golpe, haciendo que Selena casi cayera al suelo.

-          ¿Te lo pasas bien, eh? Primero te comes con los ojos a una de mis amigas mientras ella te tira la caña y ahora estas a punto de follarte a una de mis clientas en mi propia oficina. – Cruzó los brazos y intentó que las lagrimas de rabia no salieran, al menos, más allá de sus parpados temblorosos.

-          No es lo que piensas, mi amor… - Nick se acercó a ella e intentó abrazarla –
Yo no…

-          Vete- a – la – mier.da. – Le espetó Miley.

-          Yo… lo siento. – dijo Selena con una voz culpable – No sabía que él era tu marido.

-          No, cariño, no es mi marido. – dijo Miley  suspirando – es mi novio, o eso creía. – Intentó sonreír. – No te preocupes, tú no tienes la culpa. No es la primera vez que Nicholas se olvida de que tiene pareja.

-          Oh… eso es muy indignante por tu parte, Nicholas. – dijo Selena.

-          Melani. – dijo Miley, cojiendo su lista

-          Dime…

-          Si no te importa, cambiamos tu hora para mañana.

-          Como quieras.

-          Ahora, discúlpame… tengo que perder de vista a una persona. – le lanzó una última mirada, llena de odio, a Nick y cerró la puerta, de nuevo, con un portazo.
Detrás de ella.

-          Guau. – se rió Selena. Nick aun estaba con la boca abierta. – Entonces, no es tan mosquita muerta. Tiene su mala hostia.

Nick negó con la cabeza. Apretó los labios, intentando no soltar toda la rabia en darle una paliza a aquella jodida mujer.

-          No me puedo creer que seas tan hija de pu.ta. – Y la dejó allí, saliendo del despacho de Miley. – Mi amor, espera… - dijo, corriendo detrás de Miley. – No es lo que piensas, por favor, déjame explicarte…

-          Que no, que no me cuentes nada. Que me dejes. - Miley ni siquiera se giró. Se metió dentro del coche. – Mónica, ¿me cierras tu el centro, por favor?

La rubia le hizo un gesto de aprobación. Miley Sonrió a su vez, metiendo las llaves para encender el motor.

-          Que hagas lo que quieras con tu vida, pero ahora mismo, estoy EN-FA-DA-DA. Así que, mejor déjalo aquí. – Le dio al acelerador – Ahora, si me permites…

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Cap decicado a Vale es que de verdad me encanta tu Mini novela Take my along espero que todavia no alla terminado o mejor a un que la agas una novela
Y sarita no comente en tu blog esque el interne no anda muy bien

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